La huella ecológica y social que genera la industria de la moda es también responsabilidad de cada uno de los integrantes de la sociedad, principalmente cuando la desechamos y va a parar a los tiraderos y más frecuentemente cuando al lavarla, pues se hace uso de detergentes químicos que se descargan a los ríos y cuerpos de agua con la consecuente contaminación.
Así lo explicó Ana Laura Esquivel Domínguez, responsable de Educación Ambiental en el Parque Metropolitano Bicentenario, durante la realización de la Expo Trueque de Moda, evento que congregó a productores y distribuidores de ropa, cosméticos, productos para el cuidado de la piel y de limpieza ecológicamente sustentables, así como de alimentos y botanas con alto valor nutricional.
Natalia Miranda, organizadora y representante de Bio Truque, indicó que también se contó con la participación de personas que donaron ropa que ya no usan y está en buen estado con uno de los fines: darle una segunda oportunidad a las prendas adaptándolas y reparándolas o bien, cambiando por otros artículos elaborados con el principio de sustentabilidad ecológica.
Alma Laura Santana de Lacta Corazón, una organización de mamás que buscan que su maternidad sea eco-amigable y más económica en cuanto a la adquisición de pañales, por lo que cuentan con una línea ecológica hecha con fibras de bambú y felpa de micro-fibra que se colocan en un porta pañal hecho con una cubierta impermeable y broches para ajustar al tamaño del bebé desde 3.600 kilogramos.
Estamos ofreciendo pañales de tela que el bebé usa desde que nace hasta los dos años o hasta que deje de usarlos, calculamos que en toda su etapa de crecimiento utiliza alrededor de 20 pañales, mientras quede los desechables usaría entre tres mil y tres mil 500 cuyo costo de contaminación y un gasto de entre 25 mil pesos y 30 mil pesos, en comparación con los seis mil pesos que invertirían en pañales de tela
También hay toallas sanitarias y protectores para lactancia, copas menstruales que permiten ayudar a plantas y árboles porque contienen células madre que funcionan mejor que otros fertilizantes, entre otros artículos que sólo requieren lavarse como cualquier prenda de ropa íntima o de bebé, secarse y volver a utilizarse, pues tienen un promedio de vida de siete años.
Ana Laura Esquivel, adscrita a la coordinación General de Conservación Ecológica, llamó a poner atención en lo que se compra, pues muchas prendas de ropa están elaboradas con derivados del petróleo que generan alergias, irritación y hasta cáncer en la piel, además de que cuando se desechan con altamente contaminantes.
También pidió revisar el país de origen, pues algunas prendas provienen de países donde hay explotación laboral de mujeres y niños principalmente y de otros donde el consumo de recursos naturales es más grande como la India y Afganistán, donde en tan menos de ocho meses consumen el equivalente a un año en los países desarrollados, con lo que no se dan tiempo al planeta de reponerlos.
La experta en educación ambiental recomendó evitar usas detergentes y suavizantes de telas con alto contenido de químicos y utilizar en su lugar los jabones en pastilla, bicarbonato y vinagre como limpiadores y suavizantes y la jamaica como desinfectante, entre otros que no contaminan el agua