Tejupilco, México.- En la zona sur de la entidad habita uno de los alacranes más peligrosos de todo el país y es autor de por lo menos cinco mil picaduras anuales en los municipios sureños, donde la escasez de suero, las clínicas cerradas o inclusive la falta de transporte para buscar atención médica, los obligó a “fabricar” su propio remedio que consiste en "alacranes ahogados en alcohol", “ya nos acostumbramos a las picaduras de alacrán y por lo menos aquí nosotros ya tenemos remedio, pues la clínica sólo abre por ratitos”, señaló un habitante de la comunidad de El Sauz de San Lucas.
En el Estado de México y específicamente en los municipios de la zona sur de la entidad como Tejupilco, Tlatlaya, Luvianos, Amatepec, Tenancingo e inclusive Valle de Bravo, entre otros, habita una de las siete especies de alacranes más venenosos de todo México que se denomina Centruroides limpidus limpidus, debido a su clima, vegetación y sobre todo su altura sobre el nivel del mar.
Según autoridades del sector salud en esta zona, ocurren hasta cinco mil picaduras de alacrán y es en el municipio de Luvianos donde más ocurre este tipo de ataques, seguido de Tejupilco y Tlatlaya, por lo que están obligados a contar con suficiente abasto de antídoto para el piquete de alacrán.
Estos animales, refieren, se esconden fácilmente en montones de piedras y escombros en general y en épocas de lluvias e incluso de frío, se acercan a los domicilios y se meten en zapatos o entre la ropa, teniendo preferencia por techos de palma o concreto.
Cabe señalar que una alta frecuencia de ataques de alacrán ocurre durante la noche, cuando las personas se encuentran dormidas, ya que al caer del techo y sentir movimiento, instintivamente responden con la agresión.
Al respecto, Miguel Chavarrieta Yáñez, técnico en urgencias médicas básicas de la Cruz Roja de Tejupilco, señaló que los casos por picadura de alacrán son muy altos, “cuando nos reportan el caso, vamos, pero generalmente los familiares lo mueven con sus propios medios, debido a que el tiempo es vital en estos ataques”, indicó.
La sala de urgencias del hospital general de Tejupilco, dijo, recibe mucha gente que llega con síntomas de vómito, insuficiencia respiratoria, ello, debido a la picadura de un alacrán, por lo que de manera inmediata se tiene que brindar atención al paciente, pues puede llegar a morir.
Aunque también se tienen problemas de mordeduras de serpiente o la llamada chinche besucona o trompuda, el técnico en urgencias médicas señaló que la picadura de alacrán es la más común en esta zona de la entidad, “el mayor número de casos los tenemos en temporada de mucho calor e inclusive en temporada invernal, pues los alacranes buscan el calor dentro de los hogares”, añadió.
Ahora bien, indicó que si bien los reportes son constantes, en la mayoría de las ocasiones las unidades llegan al domicilio marcado, pero los pacientes generalmente ya fueron trasladados por otros medios o en su caso ellos mismos se curan mediante remedios caseros que preparan.
“La gente de esta zona, ya tiene su plan B y por lo mismo, cuando presenta la picadura de un alacrán, utiliza remedios caseros que sin lugar a dudas funciona, y es que es muy difícil conseguir el suero anti-alacrán que sólo maneja el sector salud o si hay en farmacias, tienen que pagar poco más de mil 300 pesos”, finalizó.
Sobre el tema, un habitante de la comunidad de El Sauz de San Lucas en Tejupilco, mencionó que la gente está acostumbrada a las picaduras del alacrán y por lo mismo, ya saben qué hacer, “mira si aquí te pica un alacrán antes de las 2 de la tarde, pues vas a la clínica, pero si no, tienes que buscar la forma de ir hasta Tejupilco y haces una hora de camino”, mencionó don Artemio.
Por eso, manifestó que, la gran mayoría de habitantes de ésta y otras zonas, tienen algunos remedios caseros como hierbas o inclusive en alcohol meten alacranes vivos y si sufren una picadura, se abren la piel y se ponen este remedio.
“A mí en cada cosecha me pica un alacrán y el dolor en ocasiones es insoportable, pero bueno con algunas hierbas me lo curo sin necesidad de ir a la clínica, pues sólo la abren de ratitos”, agregó el habitante.
Aquí, finalizó, la mayoría de los hogares tienen un frasco con alcohol de alacrán, pues ante cualquier picadura tienen con qué curarse, pues de lo contrario no llegan a un hospital, “nosotros ya estamos acostumbrados al alacrán y sabemos que si nos pican, pues tenemos que curarnos sin darle a saber a las autoridades de salud”, aseveró.