Para realizar terapias de rodilla, un grupo de investigadores de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM) creó un robot movilizador de esa área corporal, el cual puede ser la opción para una rehabilitación a domicilio.
Es un prototipo concebido para personas con algún problema en la rodilla, desde niños de 10 años de edad hasta adultos mayores, puede ayudar en la reducción del dolor, rigidez e hinchazón de acuerdo con las indicaciones del médico especialista.
El dispositivo se elaboró para cubrir varios segmentos de la población, pues durante la investigación no se pensó en una causa específica de enfermedad.
“Nos dimos cuenta de que no era así porque todos en algún momento hemos tenido algún problema de la rodilla, ya sea que hagamos mucho deporte o no lo hagamos”, señaló el doctor en Ciencia y Tecnología Mecatrónica, Luis Adrián Zúñiga Avilés, quien es uno de los investigadores del sistema.
En ese proyecto también participan los doctores en Robótica Biomédica, Juan Carlos Ávila y Adriana Vilchis González, quienes unieron sus conocimientos para producir este proyecto, así como un equipo de terapeutas, médicos y estudiantes de la Facultad de Medicina e Ingeniería.
El robot se integra por 21 componentes que dan vida a una máquina pasiva, esto significa que el paciente puede mover la rodilla para iniciar su proceso de rehabilitación terapéutica, explicó Zúñiga.
El profesor e investigador, adscrito a la licenciatura en Ingeniería Médica de la Facultad de Medina, dijo que de acuerdo con los estudios y a las diferentes pruebas de diseño efectuadas a lo largo de una década con pacientes del Centro de Rehabilitación Especial y Educación Especial (CREE), se detectó que hay una gran necesidad en la rehabilitación de rodilla.
Explicó que el aparato tiene varias ventajas para el usuario, una de ellas es que puede colocarse en ambas rodillas.
El paciente con el dispositivo, agregó, puede recibir rehabilitación en tres posiciones: sentado, acostado o parado, según lo determine su médico, terapeuta u ortopedista.
“Es un sistema adaptable para diferentes edades, fue pensado para ser utilizado por niños, jóvenes, adultos y adultos mayores al posicionarse en diferentes tallas”.
Mencionó que el exoesqueleto del robot se sujeta a la cintura, rodilla y tobillo de la persona, el cual se adapta de acuerdo al tamaño del fémur y tibia, la cual tiene un mínimo de 1.50 metros y un máximo 1.80 metros.
Para ese parámetro, abundó, se consideró la ergonomía del mexicano, con base en el INEGI.
“El diseño trabajado no considera a neonatos o bebés, sólo niños de 10 años de edad en adelante, hasta adultos que no midan más de 1.80 metros”.
El aparato está elaborado con materiales de aluminio con puentes de titanio, que comprende tres sistemas principales: base, movilizador configurable y el subsistema adaptable.
Contiene motores, los cuales permiten que opere de forma lineal. Funciona eléctricamente para extenderse, levantarse o retraerse de forma coordinada, añadió.
TERAPEUTA EN CASA
Para iniciar su labor debe ser programado de acuerdo con los rangos de velocidad, desplazamiento lineal y angular, recomendados por el especialista en salud que atienda al paciente en cuestión, pues el robot vendrá a fungir como terapeuta, sin la presencia física de éste.
“No nos gusta mucho la palabra de que sustituye al terapeuta, sino que lo complementa y lo que hace es brindar ayuda al usuario al ser más homogénea la rehabilitación”, aseguró.
Lo anterior, porque muchas veces existe el riesgo de que los movimientos de la terapia sean más lentos o más rápidos o bien existe resistencia por parte del paciente para el desarrollo de la misma.
Uno de los enfoques del invento es la portabilidad, pues se puede tener en casa para cuando sea requerido, así se evita acudir a una hospital o centro médico para un proceso de rehabilitación.
El sistema se alimenta de 110 volts de energía, suministro promedio instalado en una casa-habitación, su vida útil es de 100 mil ciclos, lo cual, aclaró, dependerá del uso, la frecuencia, velocidad, rango y ángulo recomendado por el médico.
El investigador dijo que ve al robot “con ojos de padre amoroso”, porque bien podría ser un tipo muleta que se adquiere en caso de llegar a presentarse una lesión en la zona, pero con la ventaja de ser ligero, con gran potencial para población geriátrica.