Los egresados del centro de internamiento para adolescentes “Quinta del Bosque” enfrentan el riesgo de volver a delinquir por las fallas en la reinserción social.
Según algunas estadísticas de cada 10 menores que cometen un delito y son ingresados a la “Quinta del Bosque”, tres reinciden en el mismo u otro delito. Algunos de ellos, como ya han cumplido la mayoría de edad, son ingresados a los penales estatales.
“El ambiente en los centros de detención no es el más indicado para poder hacer una reinserción social adecuada” aseguró Ricardo Sodi Cuellar, titular del Poder Judicial en el Estado de México (PJEM).
En el análisis de estadísticas de 2020 a 2022 en “Quinta del Bosque” se descubre que el mayor número de ingresos son por los delitos de robo y contra la salud, seguido por homicidios.
Derivado de una solicitud vía transparencia con oficio 00097/SSEM/IP7/2022 se detalla que durante 2020 egresaron de la “Quinta del Bosque” 198 e ingresaron 199.
Por el delito de robo fueron remitidos 101, por delitos contra la salud 37 y por violación 18.
Por el delito de homicidio fueron 15 ingresos,12 por secuestro y siete por la portación de arma de fuego. Destaca uno por feminicidio, cuatro por lesiones y tres por extorsión.
Durante el 2021 el panorama fue semejante pues por robo llegaron 115, por delitos contra la salud 51, por violación 43, por homicidio 13 y 12 por secuestro, ocho por portación de arma de fuego, siete por lesiones y tres por extorsión para un total de 252 ingresos, en tanto egresaron 260. De enero a marzo de este año se contabilizan 60 egresos y 56 ingresos.
En este período el mayor número fue por delitos contra la salud con 22 ingresos, le sigue el robo con 20 y seis por violación.
La extorsión sumó tres ingresos, dos por homicidio e idéntico número por la portación de arma de fuego y uno por lesiones.
Sodi Cuellar explicó que recientemente celebraron un convenio con la Universidad Autónoma del Estado de México para hacer un estudio de cuántas personas nacen en reclusión y cuántos de ellos en su vida adolescente o adulta delinquen y reingresan al sistema penitenciario.
“Este estudio es para saber cuáles son las causas”, aclaró.
Explicó que el PJEM impulsa el tema “Infancias con referente de crianza en prisión: infancia es destino” para saber cuáles son las causas de la delincuencia juvenil y adolescente.
“También (se realizará) un estudio con los adolescentes que delinquen para entender la causa, no sólo el efecto: sino saber porqué delinquen”.
Estamos estudiando la etiología, las causas de la delincuencia juvenil y adolescente para lograr una reinserción social adecuada dijo Sodi Cuellar.
A primera vista y sin tener los estudios todavía hechos la reincidencia de adolescentes es bastante elevada, pero es con datos preliminares, muy preliminares, abundó.
Sin duda la pobreza, marginación, falta de educación y falta de oportunidades laborales es el círculo vicioso que provoca la delincuencia juvenil, recalcó.
Aseguró que en la “Quinta del Bosque” han empezado un proyecto muy ambicioso de reinserción social de los jóvenes.
A través del voluntariado les hemos donado computadoras y mucho equipo para fomentar la reinserción social, el estudio, el deporte y darles una oportunidad al salir.
Inclusive se apoya a instituciones que les enseñan a laborar.
Tenemos un nuevo esquema, dijo, el método APAC para buscar una reinserción social de los niños adolescentes para que puedan tener ya sea hogares de acogida u oportunidades de trabajo bajo supervisión.
MÉTODO APAC EN EL ESTADO DE MÉXICO
En mayo del año pasado la Arquidiócesis de Toluca, la Confraternidad Carcelaria y el PJEM en la entidad firmaron un convenio de concertación para la reinserción social de los adolescentes privados de libertad, cuya finalidad es la colaboración interinstitucional en la reinserción a la sociedad y a sus familias, de los jóvenes de la “Quinta del Bosque”.
Durante dicho convenio se detalló que deben darse oportunidades a los adolescentes, de lo contrario, son las personas más abandonadas, producto de un tejido social dañado, de una economía familiar sumamente pobre, que delinquen por carecer de oportunidades.
También se anunció que el Voluntariado del PJEM desarrollaría el proyecto de un albergue para las familias que visitan a los adolescentes de la “Quinta del Bosque”, pues muchos de los padres no cuentan con los recursos para hospedarse, en ocasiones pasan la noche al intemperie y terminan por abandonar a los menores.
En tanto Valdeci Antonio Ferreira, director general de Fraternidad Brasileña de asistencia a los Condenados, habló del Método APAC implementado en 1972 en esa nación, para lograr la recuperación de personas abandonadas tras de las rejas, a través del trabajo, la educación, la participación de la comunidad, la asistencia a la salud y la espiritualidad, permitiendo bajar la reincidencia de 80% a 15%.
NO TIRES LA TOALLA
Otro de los programas para promover la reinserción social de los adolescentes ha sido “Knockout: no tires la toalla” dirigido por Alma Eunice Rendón Cárdenas quien aseguró que no nada más es una cuestión deportiva, sino va de la mano con la parte de terapias cognitivo conductuales y el trabajo familiar.
“Este programa lo que tiene detrás es que nadie nace delincuente, son factores de riesgo y contextos, eso es lo que tenemos que trabajar, habilidades y herramientas también para la vida, para que a lo mejor los que no tuvimos una muy buena primera oportunidad, sí tengamos una real segunda oportunidad” explicó durante uno de los eventos.
Rendón detalló que en la “Quinta del Bosque” han apoyado aproximadamente a 40 menores en cada uno de los años cuando han aplicado este programa, es decir, un total de 120 adolescentes por los tres cursos impartidos.
Aseguró que están iniciando el programa por cuarto año consecutivo.
Sin embargo, este programa no es aplicado para mujeres.
“El primer año incluí una parte en una cuestión productiva con mujeres, incluso les donamos algunas máquinas, telas, etcétera para un proyecto productivo. Nosotros trabajamos con hombres, casi ninguna organización trabaja con hombres por eso nosotros nos dedicamos más de hecho a hombres” explicó Rendón Cárdenas.
MEJORAN SU VIDA
La organización civil Reinserta realizó el estudio “Niñas, niños y adolescentes reclutados por la delincuencia organizada” cuyas historias han conducido a que estén en conflicto con la ley.
La vida dentro del centro de internamiento, pinta muy distinta para estos adolescentes, detalla la organización civil.
En su mayoría, el cambio, aunque pareciera negativo, representa una mejora de condiciones de vida. Sorpresivamente, aquello que se piensa en un primer momento como un castigo termina siendo, para muchos, la única salvación detalla Reinserta.
Sin embargo, si no tienen garantizadas condiciones de libertad seguras y lejos de contextos de violencia, los adolescentes no tienen oportunidades reales de reinsertarse en la sociedad; por más trabajo que se haga dentro del centro, por más planes individualizados de actividades que se construyan en internamiento, la reinserción simplemente no es posible porque el peligro está latente afuera, recalca.
DISFUNCIONAL
Los adolescentes que cometen hechos antisociales son producto de un entorno social desfavorable, detalló Sodi Cuellar.
“Sus núcleos familiares están totalmente abatidos, disfuncionales, rotos, con un ambiente de pobreza, marginación, falta de educación y pocos valores familiares.
“El ejemplo familiar tampoco es el mejor y el destino de estos jóvenes es predecible”,aseguró Sodi Cuellar.
Lo anterior se ratifica con el testimonio de Sara, una menor internada quien fue entrevistada por la asociacion civil Reinserta.
“Hubo un tiempo que mi mamá nos dejó solos. Mucho tiempo antes de que se dejaran mis papás, mi mamá ya no sentía nada por mi papá, aunque vivíamos todos juntos y nos dejaba con mi papá, y yo veía a mi mamá que tenía a sus novios y se salía, nos dejaba solos y se iba con sus novios”.
Por ello, pese a que el abandono más reiterado es el del padre, también se observa la ausencia de la madre con bastante frecuencia, lo que coloca a las y los adolescentes en escenarios de desamparo total.
“Mis tíos hablaron con mi mamá cuando se dieron cuenta de que nos dejaba solos a mí y a mi hermano o encargados con personas con quienes corríamos peligro. Y luego nos fuimos a vivir con mi abuelita, cuando yo me fui a vivir con mi abuelita yo sentí que respiré. Dije: ‘No manches, ya no vamos a estar de casa en casa, ya no nos van a hacer el feo, ya no nos van a pegar, ya no nos van a querer correr, ya no nos van a hacer sentir así, ya no nos van a querer hacer cosas” abunda el testimonio de Sara.
Para combatir esta problemática que se trae desde el hogar, dijo Sodi Cuellar, se necesita fomentar la educación para el trabajo, la educación técnica.
El titular del PJEM ahondó que con el apoyo de la Fundación Slim han aplicado en la “Quinta del Bosque” talleres de carpintería, electricidad y mecánica para que cuando salgan puedan integrarse al mercado laboral.
DELINCUENCIA ORGANIZADA
Los delitos contra la salud han incrementado entre los jóvenes y es entendible, explicó Sodi Cuellar, pues quienes son consumidores están atrapados con una cadena casi de esclavitud ya que se procuran las sustancias a través de la delincuencia, pero como no trabajan su única forma es ser proovedor-consumidor, así se convierten no sólo en distribuidores sino en clientes y son coptados por la delincuencia organizada. Su pronóstico de vida es muy malo, aceptó.
En tanto Reinserta detalla en su estudio que el consumo de drogas dentro de los centros de internamiento es otro elemento analizado. Aunque todo pareciera indicar que esto termina una vez que se les
priva de la libertad, eso no siempre ocurre pues en ocasiones la falta de pericia para ubicar a las y los adolescentes relacionados con la delincuencia organizada afecta directamente las probabilidades de intervenir en su desvinculación y reinserción social.
Detalla la organización civil que las conductas por las cuales más detienen y procesan a las y los adolescentes relacionados con la delincuencia organizada son homicidio, delitos contra la salud, en cualquiera de sus modalidades, portación de arma, secuestro, extorsión y halconeo.