La búsqueda de Paola y su pequeño hijo Dylan, de 5 años, continúa en la colonia Lázaro Cárdenas segunda sección, tras el derrumbe del Cerro del Chiquihuite.
Familiares de las víctimas reclaman los cuerpos de las dos personas que permanecen desaparecidas desde el pasado 9 de septiembre.
Jorge Mendoza, esposo de Paola, aseguró que no se moverá de la "zona cero" del derrumbe hasta que los cuerpos de su familia sean encontrados, “esto para darles sepultura”.
“No me iré de aquí hasta encontrarlos", indica Jorge.
Paula López, abuela de los niños, comenta: “estoy en espera de que nos den los cuerpos de mi nuera y mi nietecito, avances sí hay, pero el problema es romper la piedra grande para que entren los rescatistas a buscarlos”.
Estos momentos de búsqueda se han hecho eternos para esta familia, que trata de recuperar los cuerpos de Paola y Dylan.
Ayer lunes, rescatistas que permanecen en la zona del cerro del Chiquihuite continuaban con la estabilización del terreno y esperan terminar en las próximas horas, para empezar a fraccionar una de las rocas que cayó sobre el domicilio donde vivía la familia de Jorge.
La enorme roca será apuntalada para minimizar riesgos y con esa seguridad los equipos realizarán un plan de trabajo para que rescatistas ingresen reptando bajo los escombros y puedan sacar los restos de las dos víctimas que dejó el deslizamiento de piedras y lodo en esta pendiente.
El ingreso de los rescatistas, indican, podría darse entre hoy martes y mañana miércoles.
Censan a las familias
El gobierno de Tlalnepantla informó que hasta el martes se habían censado 214 familias que tienen sus viviendas en el polígono de 200 metros cuadrados, considerado de riesgo inminente y que, por tal razón, no pueden regresar a sus hogares.
Asimismo, comenzó el registro para conocer el estado jurídico de las viviendas afectadas por este desgajamiento en el cerro del Chiquihuite y se investiga si los inmuebles eran propiedad privada o son asentamientos irregulares o invasiones.
Las autoridades estatales han pedido a las personas que se encuentran en riesgo que dejen sus hogares, pero los habitantes se niegan a salir de sus casas porque es su patrimonio y no quieren perderlo.
Hay rapiña en la zona
Jorge es uno de los vecinos que tiene que evacuar su casa, pero no lo ha hecho. “Sí nos han ofrecido ayuda, pero yo no quiero salir de mi casa, porque hay robos”, asegura.
“Nos dieron un papel para comprobar que fuimos notificados, las personas que quieran quedarse están en su derecho; nosotros nos quedaremos, porque ahorita hay muchos robos, se han metido a las casas”, asegura Víctor, vecino que habita el polígono que se encuentra en riesgo inminente.