Un grupo de feministas se manifestó esta tarde frente al palacio municipal de Atizapán y causaron destrozos en la fachada del inmueble.
De acuerdo a las autoridades, minutos después del mediodía un un grupo conformado por aproximadamente una treintena de mujeres vestidas de negro y con capucha, caminaron desde las inmediaciones la Escuela Secundaria Técnica "Simón Ramírez Rodríguez", rumbo al palacio.
Las feministas, al parecer integrantes de la colectiva “Resistencia Feminista Atizapán” y “Colectiva Bloque Negro”, avanzaron por la avenida Adolfo López Mateos. Durante la marcha portaron cartulinas para exigir justicia por los casos de feminicidio suscitados en la zona; tal es el caso de la reciente muerte de una joven llamada Susana.
Después de realizar pintas en la fachada del palacio municipal, algunas manifestantes rompieron los ventanales de la fachada del edificio con palos y bates; además causaron destrozos en los paraderos de autobuses ubicados a las orillas de la explanada cívica y realizaron por varios minutos un bloqueo sobre el bulevar Adolfo Lopez Mateos. Al sitio arribaron elementos de la Policía Municipal; sin embargo solo se limitaron a observar la manifestación.
Debido a que la marcha se autoproclamó como "Separatista", no se permitió la presencia de hombres. Sin mayores contratiempos, las manifestantes se retiraron del lugar gritando: "Es la primera llamada".
Susana fue localizada sin vida en Atizapán
El pasado 26 de marzo familiares de Susana “N” de 29 años presentaron ante la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM) una denuncia por la desaparición de la joven, quien salió de su domicilio el día 22 del mismo mes para acudir a una entrevista laboral. Días después fue hallada sin vida en la colonia San Juan Bosco, en el municipio de Atizapán de Zaragoza.
La FGJEM informó que aprehendió a Javier “N” como probable responsable del feminicidio. La joven llegó al domicilio del detenido en busca de empleo y al parecer este le quitó la vida en el interior de un inmueble de la colonia Profesor Cristóbal Higuera, para luego abandonar su cuerpo dentro de un costal en la vía pública.