Sobrevivir al periodo de pandemia del Covid-19 con bajas ventas y constantes aumentos en sus insumos no ha sido fácil para las pequeñas fondas de Toluca, tal es el caso de "Cocina Sarita", la cual opera desde hace poco más de 30 años.
La propietaria del negocio, Irene Sánchez Ávila, recordó aquellos tiempos en los que vendían hasta 120 comidas al día; sin embargo, dicha cifra se ha reducido a 15 o menos lo cual representa una muestra de que los tiempos han cambiado.
“Somos familia y la señora Socorro que es tía de mis nietos nos apoya para elaborar la comida, pero no nos cobra porque sabe de la difícil situación económica por la que estamos atravesando. En este momento, no estamos en condiciones de pagar sueldos a otras personas para que laboren aquí”, externó.
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Asimismo, hizo referencia a los inicios de “Cocina Sarita” la cual se encontraba en la calle de Santos Degollado número 109 pero ahora operan a un costado del Planetario, del lado de la iglesia del Carmen en el centro de la ciudad.
También mencionó con tristeza que hace ocho años sufrió un accidente el cual le generó una discapacidad porque no camina y los tratamientos que requiere son costosos.
Aunado a lo anterior, lamentó que sus principales insumos se encuentren “por las nubes” con el pretexto de que la inflación también sigue repuntando.
Según el Banco de México (Banxico), la economía mexicana mejorará hasta el tercer trimestre del próximo año pero mientras esto ocurre la inflación se ubica en 7.8%.
“La situación de la inflación nos está afectando mucho; por ejemplo, el kilo de aguacate ya sobrepasa los 100 pesos. Anteriormente, a nuestros clientes les dábamos dos rebanadas, pero ahora ya no podemos hacerlo”, señaló.
Lamentablemente, comentó, el ajuste constante de precios lo han observado en productos productos como el jitomate, carne, frutas, el huevo, el aceite y la tortilla; sin embargo, mantienen el precio de su menú en 65 pesos.
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Consideró que otro factor que les ha venido afectando es la pandemia, porque dejaron de consumir muchos trabajadores de los diferentes niveles de gobierno.
“Por 65 pesos la gente puede comer con nosotros, y le ofrecemos un litro de agua, sopa, guisado, tortillas, salsa, frijoles y cubiertos. Hemos querido aumentar nuestros precios a 70 pesos, pero consideramos que nuestros clientes no lo aceptarían”, apuntó.
Por su parte, su hijo Israel Aguilar Sánchez, indicó que deben invertir en desechables, ya que mucha gente no se acostumbra a llevar sus moldes, a pesar de que con la anterior administración municipal entró en vigor la norma que prohíbe el uso de este tipo de refractarios, así como de las bolsas de plástico.
“La realidad es que como ciudadanos no tenemos educación ambiental, y no llevamos refractarios para comprar en los negocios”, aseveró.
Finalmente, si alguna persona está interesada en consumir algún delicioso platillo en “Cocina Sarita”, puede acudir directamente o llamar al número 7226352204.