La reactivación de eventos públicos continúa en el valle de Toluca; este domingo cientos de carros alegóricos tapizaron las calles de la delegación de Santa Ana Tlapaltitlán en honor a San Isidro Labrador.
Desde las 09:00 horas comenzaron a formarse los carros alegóricos que participaron en este tradicional paseo de agricultura y ganadería en honor a San Isidro Labrador.
“Yo creo que son más de 200 carros alegóricos, acompañados por cuadrillas de danzantes, payasos y otros personajes que hacen vistoso el recorrido”, indicó uno de los participantes.
Explicaron que el paseo inicia una vez que finaliza la celebración religiosa respectiva y los carros alegóricos, todos con la imagen de San Isidro Labrador recorren las calles de la delegación.
“Son incontables los carros que participan en este paseo, que termina hasta las altas horas de la noche. Todavía hasta las 21:00 horas algunos reciben los regalos que les dan a los participantes”, añadió.
Durante el desfile, los participantes regalan frutas, dulces, pan y hasta artículos de limpieza, a los asistentes.
“Es una tradición dar este paseo en honor a San Isidro Labrador a quien desde nuestros antepasados le pedimos que nos mande las lluvias para nuestras tierras”, recalcó otro de los participantes.
Al respecto el representante de la Cuadrilla Crispín Morales, señaló a El Sol de Toluca que ya llevan 55 años participando en este paseo de la Agricultura.
“Este es mi grupo de Marías cosechadoras y sembradoras, y aunque no hay tierras venimos simulando que sembramos con yunta”, recalcó don Crispín.
Expresó que año con año preparan este paseo y junto con su familia incluyendo nietas, bailan con alegría al lado de sus yuntas en esta festividad en honor a la agricultura.
“Es cierto que ya no tenemos tierras pero aun así veneramos a Isidro Labrador para que nos brinde agua para todos nosotros”, enfatizó don Crispín.
Durante el recorrido que se prolongó todo el día, vecinos salieron a las afueras de su domicilio para presenciar el paseo y disfrutar de los bailes que cada cuadrilla realizaba a su paso.
Una vez que finaliza el recorrido, los participantes reciben un regalo mismo que es donado por gente del pueblo y representa un reconocimiento a una tradición que casi cumple 400 años.