San Mateo Atenco, México.- Cuando apenas iban saliendo de las inundaciones provocadas por del desbordamiento del río Lerma, los encharcamientos volvieron a preocupar a los habitantes de este municipio, quienes ya claman al cielo “que ya deje de llover”, pues no duermen pensando en que el agua entre a sus hogares.
Durante un recorrido realizado por la avenida principal, varios camiones tipo vactor “limpiaban” los restos de lodo que dejaron los encharcamientos del domingo, “estamos limpiando, esto fue sólo de unas horas. Lo cierto es que cada vez damos una respuesta más rápida”, señaló un trabajador de la Conagua.
Indicaron que las lluvias del fin de semana afectaron a las zonas de siempre y sólo fueron encharcamientos, “la zona inundada por el desbordamiento del río Lerma no tuvo nada que ver con los encharcamientos del domingo, allá la situación ya mejoró”, dijo Ernesto Pérez, vecino de la calle de Juárez de este municipio.
Y efectivamente, durante un recorrido realizado por la orilla del río Lerma se constató que el nivel del afluente bajó su nivel unos 20 centímetros. “Desde el miércoles estamos día y noche aquí. Lo que hacemos es bombear el agua de la zona inundada al río”, comentó uno de los trabajadores.
Recalcó que los trabajos no han parado y eso ha permitido que los niveles de agua hayan bajado. “Poco a poco está bajando el nivel de la zona inundada, se monitorea el río prácticamente las 24 horas del día. De hecho allá hay una patrulla de la policía municipal, atentos a cualquier emergencia”, añadió.
Algunos vecinos de la calle de Cinco de Mayo perteneciente al Barrio de Guadalupe, indicaron que la situación ya no es tan grave; sin embargo, aunque algunos ya están regresando a su casa, están a la expectativa. “Que ya deje de llover, es lo que pedimos muchas familias, pues tenemos miedo de que se vuelva a desbordar el río”, refirió un vecino de la calle Arboledas de la misma zona.
Consideraron que si bien el agua que inundó más de mil hogares ya bajó, el nivel del río Lerma es preocupante. “No podemos dormir bien, pues si llueve estamos en alerta para poder salvar nuestros muebles o incluso la vida, estamos en la incertidumbre”, dijo José Morales.
Manifestaron que afortunadamente la llegada de maquinaria les ha dado un poco de tranquilidad, pues eso propicia que los ríos que conectan con el Lerma bajen su nivel. “Sí hay una máquina que está desazolvando este río que se conecta con el Lerma, y eso, por lo menos ha bajado el nivel”, indicó el vecino de la zona.
Cabe señalar que en las inmediaciones de la zona afectada por el desbordamiento del río Lerma todavía labora personal del Gobierno del Estado de México, así como bomberos de San Mateo Atenco y hasta elementos del Ejército Mexicano, específicamente en labores de limpieza.
“Todavía estamos recorriendo casa por casa para poder apoyar a los afectados, la idea es que ellos se encuentren bien”, aseveró una enfermera del Instituto de Salud del Estado de México (ISEM).