Hasta el 29 de julio, la presa Miguel Aleman en Valle de Bravo, registró un aumento en el nivel de agua al pasar de un 27 % a un 30.4 %, esto se debe a las recientes lluvias que se han registrado en el municipio, esto de acuerdo con datos de la Comisión Nacional del Agua.
Sin embargo este incremento no es visible ya que sólo representó un metro más de altura, de acuerdo con prestadores de servicio.
“Al ser una presa de estas dimensiones no podemos ver el metro que subió, pero bueno las lluvias nos han dejado algo bueno en las últimas semanas que este lugar pueda ir recuperando poco a poco su nivel” refirió, Andrés, prestador de servicio.
Para los vendedores de artesanías y comerciantes de Valle de Bravo hablar de un 30% de capacidad en la presa, es sinónimo de ventas ya que aún cuando se pueden realizar actividades acuáticas, los visitantes dejaron de llegar por la baja de agua en este lugar.
“Muchas personas alomejor pensaron que el nivel de agua era muy muy bajo que ya no se podía hacer nada, pero fue lo contrario y ahora que ya se da a conocer que va para arriba, si es un respiro para nosotros, para nuestras ventas y para nuestros ingresos”
LANCHEROS PARADOS
En la zona denominada embarcadero, se puede observar a más de 15 personas cubriéndose los rayos del sol en espera de clientes, son los prestadores de servicio que todos los días ofrecen viajes en lanchas por la presa de Valle de Bravo, comentan que apenas logran vender un paseo por día, cuando anteriormente los paseantes debían hacer fila en espera de que la lancha regresara de su paseo anterior.
“Ya no es nada, esto antes era negocio veíamos aquí la gente formada para subirse a una de las lanchas, los chavos que venían en grupo hasta pagaban 100 pesos más para que les apartaramos su viaje, ahorita apenas una pareja o familia se sube por día” comenta Juan.
Los dueños de estas embarcaciones le han apostado únicamente a ofrecer paseos los fines de semana, que es cuando más afluencia de visitantes tienen.
Ya algunos dueños mejor sacan sus lanchas desde los viernes, sábados y domingos para los paseos porque de lunes a jueves no hay nada, como ahorita que está vacío Hernan, lanchero.
RESTAURANTEROS AL 40% DE SU SERVICIO
Comer en uno de los restaurantes flotantes de Valle de Bravo, era de los principales atractivos ya que la pandemia por Covi-19 y ahora el nivel de la presa han sido factor para que la gente deje de visitarlos.
“Me acuerdo que hace unos siete, ocho años nos formábamos para entrar alguno de los restaurantes y ahora pues entras bien fácil porque ya no hay comensales, ya no hay visitantes, todo ha cambiado acá en Valle y no creo que sea para bien” comentó, Frida, turista.
En un recorrido realizado por el equipo de El Sol de Toluca, se pudo constatar que el municipio turístico luce sin visitantes, con los estacionamientos vacíos, mientras que los comerciantes, restauranteros y prestadores de servicio ven pasar las horas en espera de ventas.