Jóvenes Construyendo el Futuro brinda experiencia y se deberá fortalecer

La pandemia recrudeció la situación laboral de jóvenes. Más del 50% de empleos perdidos han sido del sector

Sandra Hernández | El Sol de Toluca

  · sábado 17 de julio de 2021

Fotos: Cortesía


Antes de la pandemia del Covid-19, la situación laboral para los jóvenes ya era complicada, y en los últimos 10 meses se estima que la mitad de los empleos que se perdieron en México corresponden a este sector de la población, una estimación de poco más de 400 mil.

Según estadísticas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), la mitad de todos los empleos que se perdieron en diez meses —839 mil 804 fuentes de trabajo formal-, pertenecían a personas menores de 29 años.

Para representantes del sector privado local, como Gilberto Sauza Martínez, presidente del Consejo de Cámaras y Asociaciones Empresariales (Concaem), el tema del desempleo entre jóvenes no representa un problema menor, e incluso forma parte de una agenda de trabajo que establecieron con la Secretaría de Desarrollo Económico (Sedeco) a través del Instituto Mexiquense del Emprendedor (IME).

La propuesta es elaborar un padrón entre el Concaem, la Sedeco y el IME para brindar capacitación, acercamiento y vinculación a los jóvenes.

Asimismo, considera que esquemas implementados por el gobierno federal como Jóvenes Construyendo el Futuro, han funcionado y los importante es fortalecerlos.

El propósito sería incorporar a las nuevas generaciones a los espacios de trabajo, ante un escenario laboral tan complicado como el que se vive a raíz de la pandemia, señala.

“Como tal, el programa funciona porque es muy positivo que el gobierno federal busque vincular a los jóvenes en temas de procesos económicos. Me parece que es una buena idea, pero consideramos que en algunos rubros se queda corto; y sin duda, existen formas de trabajarlo y perfeccionarlo”, aseveró.

Desde su perspectiva tendría que haber mayor coordinación entre los jóvenes, el programa y la empresa; es decir, buscar siempre la retroalimentación.

Oportunidad de aprendizaje

Diana Mejía Salazar se integró a una importante empresa automotriz de Toluca en el 2019. Su incursión al programa Jóvenes construyendo el Futuro fue a través de la prestación de servicio social.

“Yo lo que deseaba era desarrollarme profesionalmente. Cuando encontré la oportunidad en una compañía, los directivos me proporcionaron las herramientas y oportunidad para poder comenzar a generar aprendizaje”, recordó.

Otro caso es el de Óscar. Tiene 24 años y recién egresó de la universidad estatal. Su experiencia al buscar trabajo no ha sido buena. En la mayoría de las empresas donde acudió, la primera interrogante era saber sobre su experiencia laboral. En algún momento perdió la cuenta de cuántas entrevistas pidió.


Sus compañeros de generación le habían platicado sobre la incursión a este programa. Se inscribió y tuvo la oportunidad de ingresar a una importante empresa fabricante de pan dulce y botanas instalada en el parque industrial de Toluca.

Las primeras semanas en la planta fue organizar el archivo y hasta sacar fotocopias. Luego lo cambiaron de área y fungió como colaborador de almacén en la logística de un nuevo proyecto de la empresa. El pago mensual, a manera de beca por parte del gobierno federal, de 4 mil 30 pesos, fue un buen incentivo para el gasto en transporte y algunas comidas.

Esa experiencia que adquirió en la empresa le ha valido para que sea considerado en algunas alternativas de empleo, aunque eso sigue en pausa, pues por el momento practica actividades de reclutamiento de personal en otra empresa, donde solicitó su cambio.

Da herramientas para mercado laboral

El empresario Ernesto Sánchez Echeverri tiene inscrita su empresa a este programa. El objetivo, dice, ha sido facilitar la incorporación de un número mayor de jóvenes egresados de diferentes carreras al interior de su compañía

“Nuestra empresa Sánchez Automotriz se encuentra afiliada a este esquema porque pensamos que representa una buena vía para contratar a las nuevas generaciones”, indicó.

Actualmente la empresa automotriz da oportunidad a 25 jóvenes, y aunque no todos pueden integrarse a ésta, lo importante, añade, es que vayan adquiriendo experiencia para posteriormente formar parte de otros espacios laborales.

Mientras que, agrega, para el gobierno federal este programa puede ser una opción laboral ante la pandemia que todavía no concluye. Y si bien el objetivo no es la inserción laboral, las empresas que participan brindan formación en el trabajo.

Lo anterior porque quien recibe a los jóvenes no tiene ningún compromiso de emplearlos, ya que cuentan con una beca.

En tanto, para el presidente de Concaem, Jóvenes Construyendo el Futuro es de los proyectos más rentables que tiene el gobierno federal.

Mujeres: Con mayor vinculación

De acuerdo con el último reporte de la Secretaría del Trabajo del gobierno federal (STPS), un total de 20 mil 873 aprendices vinculados al programa se tienen en la entidad mexiquense, lo que representa el 8% del total a nivel nacional.

Básicamente las incorporaciones de jóvenes a los centros de trabajo se han presentado con mayor intensidad en cinco municipios mexiquenses: Ecatepec, Tejupilco, Nezahualcóyotl, Toluca y Amatepec.

Cabe mencionar que el mayor porcentaje de jóvenes aprendices que ha vinculado el programa en la entidad mexiquense han sido mujeres, con 12 mil 292 (58.9%). Mientras que los hombres registran un total de 8 mil 882 o el 41.1%

En cuanto al grado de estudios de los jóvenes que han incorporado al programa a nivel estatal, la mayoría han sido de preparatoria con 9 mil 221; seguidos del nivel secundaria con 4 mil 901 y licenciatura con 4 mil 325.


En lo relativo al rango de edad que más ha aprovechado el esquema, se encuentran por orden de importancia: 18, 19 y 23 años.

Cabe destacar que “Jóvenes Construyendo el Futuro” representa un programa que vincula a personas de entre 18 y 29 años de edad con empresas, talleres, instituciones o negocios donde desarrollan o fortalecen hábitos laborales y competencias técnicas para incrementar sus posibilidades de empleabilidad a futuro.

Durante dicho esquema y hasta por un año, los jóvenes reciben un apoyo mensual de 4 mil 310 pesos, así como un seguro médico contra enfermedades, maternidad y riesgos de trabajo.

Los interesados pueden consultar la página de la STPS del gobierno federal. Ahí se señalan requisitos, forma de registro y la oferta de empresas. Luego, hay un proceso de selección y la vinculación con el centro laboral.

Para Diana, el programa funciona porque aprendió a trabajar en equipo e interacción con diferentes áreas. Actualmente se encuentra en el departamento de Administración. Lo que le agrada es la atención al cliente.

“Las empresas nos están dando la oportunidad de desarrollarnos en el ámbito laboral y adquirimos experiencia”.

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