La venta de un taco de barbacoa puede ser inmune a sismos y pandemias.
La inmunidad se logra al utilizar herramientas digitales para seguir acercándose a los clientes.
Así es la historia de don Viliulfo Rodríguez Casas y su familia, quien vende barbacoa en los locales 158 y 159 del mercado Morelos de Toluca.
Su negocio ha logrado sobrevivir al terremoto de 1985, la pandemia de AH1N1 de la década anterior, el sismo de 2017 y la actual pandemia de Covid-19.
Los días críticos de la actual contingencia sanitaria los han sorteado instrumentando promociones, utilizando el WhatsApp y el reparto a domicilio.
La migración tecnológica no ha sido completa, pues no cuentan con una página de Facebook o alguna otra red social, sin embargo, con la plataforma de mensajería han tenido un aliado constante.
Uno de los problemas que tuvieron con los clientes era que los consumidores tenían reticencias para comprar en la modalidad para llevar.
“Cuando estábamos en semáforo rojo se deterioraron mucho nuestras ventas porque los clientes no querían comprarnos si no era para consumo en el lugar.
“A veces ya les estábamos despachando y nos cancelaban sólo por eso, entonces tuvimos que generar ofertas y promociones", indicó Alejandra Rodríguez Alvarado, hija de don Viliulfo.
Por eso Barbacoa Don Vili comenzó con las promociones, como regalar agua natural y consomé en la compra de determinada cantidad de barbacoa.
IMPULSO
Cuando el gobierno del Estado de México decretó el confinamiento en marzo del año pasado derivado de la emergencia sanitaria a nivel mundial, la familia Rodríguez Alvarado comenzó a buscar alternativas para realizar sus ventas sin exponer a sus clientes.
A partir de mayo de 2020 buscar otras alternativas de distribución, además de las ventas a través de WhatsApp.
“Después de generar nuestras promociones y ofertas vimos que sí hubo respuesta por parte de nuestros consumidores, comenzamos a buscar las alternativas de distribución.
“Utilizamos taxis y plataformas digitales de distribución para poder acercar la compra a cliente de manera higiénica y segura”, explicó Alejandra.
Para que todo eso fuera posible tenían que extremar las medidas de prevención, las cuales adoptaron de manera estricta.
"Tuvimos que fortalecer nuestras medidas higiénicas por medio de la aplicación de gel, la sana distancia, el lavado de manos, el uso de cubrebocas y uso de caretas", detalló.
"También utilizamos los tapetes sanitizantes, guantes de látex y varios detalles más para garantizar que se daba un servicio higiénico y que nuestros clientes tuvieran la certeza de que su compra era segura”, indicó.
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