La basura se puede convertir en recursos y con ello disminuir su impacto al medio ambiente; pero esto implica la implementación de una economía circular, su separación y reciclaje.
Lo anterior fue expresado por diversos especialistas en el Foro “Hacia una gestión metropolitana de los residuos sólidos”, realizado en la Legislatura del Estado de México y convocado por el diputado de Morena Max Correa, quien refirió que en la entidad se reciben 26 mil toneladas de basura diariamente, mientras que del total de los tiraderos, el 13% son rellenos sanitarios y el 87% son a cielo abierto.
El legislador dijo que urge que en la entidad se priorice la legislación en materia de tratamiento y disposición final de los residuos, pues en la medida de que se avance en el tema, se disminuirá el daño al medio ambiente.
Beneficios del tratamiento de residuos
De acuerdo con Carlos Córdoba, del Grupo Celsa, entre los principales beneficios de implementar un correcto manejo y aprovechamiento de los recursos, a través de la separación de los residuos orgánicos de los inorgánicos y el reciclaje, destaca la disminución de contaminación ambiental, derivado de la quema de basura, emisión de gases de efecto invernadero y otros.
A la anterior, sumó la disminución de gastos por el tratamiento de los residuos, pues al ser separados correctamente desde las viviendas, las empresas y los edificios públicos, llegan en menores cantidades a los rellenos sanitarios y tiraderos al aire libre.
En ese contexto, el especialista mencionó que se requieren rutas eficientes y diferenciadas, que contemplen la capacitación de la ciudadanía sobre la separación de residuos y el reciclaje, la recolección de basura diferenciada (orgánica e inorgánica) y la implementación de una economía circular.
Respecto a la recolección diferenciada, Córdova sugirió que los servicios públicos realicen la recolección según el tipo de residuos, es decir, que un día se lleven la materia orgánica y otro la inorgánica, lo que obligaría a realizar la debida separación desde el hogar o la industria.
A lo anterior, sumó la necesidad de contar con programas de reciclaje en escuelas de manera permanente, así como la implementación de plantas de separación de residuos en la industria, que contribuyan a que las empresas adopten la medida e incluso para incentivarlas, otorgar estímulos fiscales.
Finalmente, destacó que la correcta separación de residuos puede traducirse en una disminución de costos a los gobiernos, pues los procesos del tratamiento de basura son caros.
“Lo primero que hay que hacer es un plan integral, no podemos estar haciendo acciones aisladas o sin un planteamiento a largo plazo, yo creo que es lo más importante, muchas veces hay alcaldes que tienen la intención de actuar y de realizar la separación, pero a veces no es de una forma integral. Podrían hacer una prueba piloto en los municipios y la naturaleza de los municipios del Estado de México es muy diferente entre sí, y en ese plan hay que involucrar a todos los actores”, sostuvo el ponente.
Ley de economía circular estatal
Luis Francisco Celis Molina, coordinador de asesores de la Organización en Favor de la Economía Circular del Plástico (OFECP), expresó que la economía circular del plástico es una alternativa viable para dar un buen uso a este material y evitar que termine en los rellenos sanitarios o tiraderos al aire libre.
Explicó que en el Congreso de la Ciudad de México únicamente ha habido dos iniciativas ciudadanas que apuestan por la economía circular, la primera dirigida a los comerciantes y la segunda fue por parte de la OFECP, sin embargo, no se logró la aprobación.
Destacó que en ningún estado de la República mexicana cuenta con una Ley de Economía Circular, a través de la cual se logre aprovechar los residuos y, a su vez generar un beneficio económico, motivo por el cual ya se impulsan iniciativas al respecto en Jalisco, Baja California, la Ciudad de México, Tamaulipas y Michoacán.
“Esta Ley debe de tener los principios de economía circular, muy bien fundamentada, muy bien basada, en la operación práctica de las industrias, es una Ley que no debe de tener prohibiciones”, externó Celis Molina.
Ante el incremento de residuos en los hogares mexicanos a raíz de la pandemia de Covid-19, el especialista mencionó que se requiere una responsabilidad compartida entre la industria, la sociedad y el gobierno.
En este contexto, aseguró que la economía circular busca reducir el desperdicio, recupera recursos de la vida útil de un producto, los canaliza a la producción y minimiza la presión de producción al medio ambiente.
“Logramos reincorporar a lo que hoy conocemos como basura, a la cadena productiva nuevamente, porque las materias primas al final en su desintegración va a ayudar a dos cosas, la primera es cuidar el medio ambiente al reducir la basura y a reducir los costos de producción de los productores”, explicó Luis Francisco Celis, quien refirió que esta economía favorece la recuperación y aprovechamiento de materiales.
Agregó que la economía circular no sólo es aplicable a los residuos, sino también al agua, a los servicios de construcción, a los plásticos, vidrio, metales, entre otros.
¿La basura es un problema irresoluble?
En su intervención, Martín Alegría Jacter, ex presidente de Cibruc, insistió en la urgencia de implementar mecanismos y políticas públicas que contribuyan en la disminución de generación de residuos, así como en el aprovechamiento de los mismos en beneficio del medio ambiente y la sociedad.
Destacó que en México se producen alrededor de 120 toneladas de basura al día, en la cual no existe algún tipo de separación, misma que si se viera compacta, su peso volumétrico se traduciría en 120 mil vehículos tipo vocho.
Señaló que con la prohibición de plásticos de un sólo uso, la sociedad se inclinó de manera masiva al uso de bolsas de papel y las denominadas bolsas “ecológicas”, las cuales están hechas de polipropileno, con altos índices de químicos para su elaboración y las cuales no pueden ser recicladas.
El especialista sostuvo que la medida implementada en varias entidades del país, incluyendo en el Estado de México y la Ciudad de México, la demanda de papel aumentó considerablemente, lo que ha ocasionado una escasez de celulosa, la cual es extraída de los árboles.
“El hecho de quitar la bolsa de plástico, de prohibir, no trajo ningún beneficio”, sentenció Alegría Jacter, quien aseguró que espera que para el año 2050 haya 34 mil billones de toneladas de plástico sepultados.
Por lo anterior, dijo, es urgente la implementación del reciclaje y la economía circular de los residuos, pues año con año las cantidades generadas aumentan.
Por otro lado, evidenció la falta de conciencia ciudadana sobre el impacto de tirar la basura deliberadamente en espacios públicos, muestra de ello fue que en diciembre de 2020 llegaron mil millones de objetos al mar, de los cuales, cuatro mil fueron mascarillas y cubrebocas.
Finalmente, sugirió que para avanzar a la implementación de una economía circular se prohiban los rellenos sanitarios, pues de esta manera los gobiernos municipales de todas las entidades del país, se verían obligadas a diseñar planes integrales para el manejo y aprovechamiento de los residuos.
“Algo que estamos empujando muy fuerte es la Ley para que ya no existan los rellenos sanitarios, sólo de esa forma podremos entrar a la economía circular", aseguró Martín Alegría.
Al evento inaugural asistieron Maurilio Hernández, presidente de la Junta de Coordinación Política de la Legislatura local, autoridades municipales y estatales, así como miembros de la industria y la iniciativa privada.