Francisco Abundis Luna, fundador y director asociado de Parametría, empresa de investigación de mercados y opinión pública, afirmó que aún cuando hay quienes señalan que la elección del Estado de México es determinante para la presidencial, de acuerdo con la historia reciente no existe ninguna correlación entre ambas elecciones.
Los datos también muestran que tampoco es verdad que en los procesos de la entidad frecuentemente resulten elecciones cerradas, pues en los últimos procesos los resultados han sido abiertos.
Al participar en un foro organizado por el Instituto Electoral del Estado de México (IEEM), afirmó que vivir en la democracia implica saber vivir con la incertidumbre, donde la persona ganadora puede ser distinta a la que uno espera.
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Afirmó que el electorado cada vez vota más por personas que por partidos y puso en duda el impacto clientelar, pues aseguró que a menor electorado hay mayor impacto clientelar, pero no es el caso del Estado de México que tiene más de 12. 5 millones de electores.
El mito de supuestas elecciones cerradas en la entidad, resaltó, no tiene sustento, pues históricamente sólo ha habido una elección cerrada por la gubernatura en el Estado de México que fue la del 2017.
Refirió que mientras Arturo Montiel Rojas ganó por ocho puntos, Enrique Peña Nieto lo hizo por más de 20 puntos y Eruviel Ávila Villegas por más de 30 puntos.
También cuestionó el mito de que la elección mexiquense es determinante para la presidencial, pues en 1999 ganó el PRI en la entidad y el PAN la federal; en 2005 nuevamente ganó el tricolor el Estado de México y el PAN en el país.
Sólo en 2011 coincidieron los triunfos del mismo partido, pero para 2017 ganó Alfredo del Mazo en la entidad, y en 2018 Andrés Manuel López Obrador llegó a la presidencia. "Son lógicas distintas", sostuvo.
Destacó algunos factores que podrían influir en la elección mexiquense, entre ellos, la alianza con el Partido Verde, la cual calificó de fundamental, pues la actual candidata de Morena hace seis años le ganó al actual gobernador uno a uno, pero la coalición con el PVEM le dio el triunfo al PRI.
Además, añadió, Juan Zepeda no está y los votantes de la alianza opositora se encuentran en un dilema de decidir por quién votar, pues al elector le resulta problemática esa unión, ya que uno de cada tres panistas a nivel nacional jamás votaría por el PRI, y uno de cada cuatro priistas jamás votaría por el PAN.
Además, subrayó, el electorado cada vez vota más por nombres y personas que por partidos, y a menor electorado hay mayor impacto clientelar, pero en la entidad son más de 12.5 millones de electores.
El problema fundamental de la candidata del PRI, Alejandra del Moral, advirtió, es que aún cuando crezca su nivel de conocimiento, debe soportar la pesada carga de su partido.
Adelantó parte de una encuesta reciente y resaltó que el 27% sabe que hay elecciones y un 18% sabe que es en junio del 2023, es decir, niveles de conocimiento relativamente bajos, pero que han ido creciendo.
En la evaluación de las candidatas, dijo que Delfina Gómez es más conocida y con una mejor opinión efectiva.
Sobre el debate señaló que la mayoría de quienes lo ven ya saben por quién votarán, pues esos ejercicios cambian muy poco las preferencias y advirtió que actualmente hay mucha publicidad que se disfraza de investigación.