Ante la crisis de agua que existe en México, particularmente en la zona centro del país, la tecnología puede ser un gran aliado para combatir el desabasto y escasez, eficientando los procesos de distribución y hasta promoviendo lluvias en periodos de estiaje, explicó Miguel Adolfo Guajardo Mendoza, profesor-investigador del Colegio Mexiquense.
Destacó que, la política pública, principalmente ha focalizado su atención a las precipitaciones y la captación de agua en presas, pero se ha dejado de lado la importancia de tener en óptimas condiciones los sistemas de distribución, con ésta acción se podría recuperar hasta un 20 por ciento del líquido que se pierde en fugas.
“El principal problema es que no tenemos el mapa completo de cómo está nuestro sistema de tubería, sí se tiene el mapa de cómo está distribuido, creado, construido, pero lo que no tenemos es el mapa de fugas, a veces son fugas tan pequeñas que no generan cambios en la presión, de tal manera que los sensores no las identifican".
“En otras partes se usan los nanorobots dotados de capacidades de inteligencia artificial, de detección a través de técnicas sónicas (con sonido) o también con visión de calor, mismos que se distribuyen a lo largo de toda la red y pueden tomar semanas o meses, pero van creando todo un mapa muy completo de las fugas que existen en todo el sistema de tuberías de distribución de agua potable”, comentó el académico del Colegio Mexiquense".
De acuerdo con lo informado por el entrevistado, posterior al mapeo de fugas en las redes de distribución de agua potable, los mismos nanobots implementados en esa tarea, vuelven a ser utilizados, pero para la reparación de dichas fugas, por lo que son dotados de tecnología de soldadura de última generación.
Estos nanobots son tecnologías utilizadas de manera permanente en los sistemas de drenaje y distribución de agua de las ciudades más modernas del mundo, como Seúl, Corea y Tokio, por mencionar algunas. Dicha medida genera ahorros de entre el 15 y 20% de agua.
“Es una tecnología muy costosa, ya hay soluciones en el mercado internacional, también se pueden crear soluciones en casa, pero lo costoso es la amalgama de distintas tecnologías, porque se implementa nanotecnología con técnicas y tecnologías para detección de calor o energía sónica y también por generar un sistema de integración de la información y de vaciado en una plataforma centralizada”, mencionó Miguel Adolfo Guajardo.
Control de distribución de pipas
De acuerdo con el investigador del Colegio Mexiquense, en las labores de distribución de pipas de agua potable por parte de los gobiernos municipales y estatales, es necesario implementar mecanismos de GPS y monitoreo que permitan conocer las rutas de distribución, así como la vigilancia del líquido, lo que evitará la “ordeña” de pipas.
“Un buen sistema de control puede implementarse a partir de tecnologías GPS que puedan controlar por dónde se van moviendo las pipas, si están yendo a cubrir cierta cuota de entrega de agua en las zonas programadas, si no están en ocasiones desviándose, porque en este tipo de esquemas de distribución, desafortunadamente, a veces pega muchísimo las mermas, corrupción, desvío de pipas, ordeña de pipas, no hay manera de dar seguimiento".
“Por eso es importante dotar a las unidades, no sólo de GPS, sino también de sensores que nos ayuden a medir la cantidad que tiene cada unidad de agua, lo que nos va a permitir saber si en el camino se vació la pipa a la mitad antes de llegar al destino final".
Siembra de nubes
¿Sabías que es posible sembrar nubes para la estimulación de lluvia?, Miguel Adolfo Guajardo mencionó que es posible crear nubes a partir de la inyección de algunas sustancias, como partículas de cloruro de sodio y potasio, para favorecer la formación de nubes.
“Estas ya son medidas, hasta cierto punto desesperadas, porque cuando se está en este punto es una interrupción del ciclo del agua, es decir, no estás en condiciones de obtener la precipitación de forma natural, por lo que se tiene que volver a inducir a través de ésta siembra de nubes, pero se debe ser muy cuidadoso de que no sea una práctica normalizada”.
Guajardo Mendoza aclaró que este tipo de procedimientos se han implementado en países como Israel.
Desalinización del agua oceánica
El investigador del colegio mexiquense mencionó que otra medida en la que podría ser implementado el uso de la tecnología para combatir la crisis hídrica que se vive actualmente, es la desalinización del agua de mar, no obstante, se trata de una medida que no es costo-efectiva.
“Se trata de una medida desesperada, porque implica que ya no estamos teniendo suficiente con los mantos acuíferos de agua dulce tradicionales y tenemos que voltear a ver otras reservas, ya hay tecnología, hay grandes plantas que usan sistemas de filtración tradicional con membranas de polímeros, son muy costosas y consumen grandes cantidades de energía por el tipo de material que se utiliza para el proceso. La gran cantidad de energía que se requiere es porque se hace el filtrado una gran cantidad de veces, para que al final puedas tener un producto más o menos consumible para el ser humano. Para ello necesitamos implementar el uso de nuevos materiales, como lo son los nanomateriales, que tienen porosidades mucho más pequeñas que permiten filtrar en una o dos operaciones, obteniendo el resultado final a costos menores, pero son materiales que apenas están en desarrollo”, explicó.
Para concluir, el especialista subrayó que se trata de medidas que pueden ayudar a corto, mediano y largo plazo, pero, ante la crisis que se vive, se debe transitar a una industria más autosustentable, además de contar con una planeación estratégica urbana que privilegie el medio ambiente.