En la parte aledaña a la zona de obras de la autopista Toluca-Naucalpan, en San Francisco Xochicuautla, desde hace unos meses las viviendas han sufrido fisuras a causa de las explosiones con dinamita que realizan los trabajadores de la constructora Autovan, denunciaron vecinos.
“Parece una lluvia de piedras, yo vivo muy cerca y las piedras llegan hasta los patios, y los estallidos se escuchan muy fuertes, cimbran las casas”, explicó Reyna Domínguez Flores, vecina del poblado.
La zona de obras se ubica a unos 100 metros de las primeras casas de la parte habitada de Xochicuautla, pero no existe ningún tipo de protocolo por parte de la constructora para alertar a los vecinos sobre las detonaciones controladas que se hacen.
“Ellos (Autovan), siempre han prometido que van avisar, que van a poner una sirena y una ambulancia, pero nada, nos agarran desprevenidos”, denunció Lorenzo Domínguez.
En la zona se han cuantificado al menos 52 casas afectadas con las detonaciones, y que presentan fisuras en paredes y pisos, comentaron los vecinos.
Ante la situación el pasado 30 de agosto entre los propietarios afectados se realizó un oficio, el cual se entregó a la delegación de San Francisco Xochicuautla y a la empresa Autovan.
Reyna Flores explicó que el documento fue firmado por todos los vecinos aledaños a la zona de obras.
“El oficio ya fue firmado y nos respondieron que atenderían con una brigada pero no hay respuesta”, dijo la habitante.
Mediante un recorrido hecho por las viviendas afectadas, se alcanzó a observar fracturas en algunas viviendas y pedazos de piedra que los propios vecinos han recolectado para guardarlos como pruebas.
En la zona de obras, desde principios de año se han dinamitado cerca de dos kilómetros, aunque actualmente la obra tiene en contra un amparo federal de suspensión, comentaron los habitantes sondeados.
“En un mismo día hay hasta tres detonaciones y se programan cada semana y cada quince días”, explicó otro de los vecinos afectados.
Este lunes un grupo de peritos de la Fiscalía General de la República (FGR) acudió a San Francisco Xochicuautla para recabar evidencias sobre la continuación de las obras de la autopista Toluca-Naucalpan, pese al amparo que existe para la suspensión de los trabajos desde el mes de enero.
“Lo que queremos es que cada vez que se programe una explosión, nos informen y se haga un protocolo para evitar accidentes, porque los niños se espantan”, agregó Martha Bermudez.
Los habitantes recibieron a visitadores de la Comisión de los Derechos Humanos del Estado de México (Codhem), quienes les recomendaron hacer válido el oficio firmado de la constructora y proceder de forma legal para que los indemnicen por las afectaciones a sus viviendas.