Pese al incremento de casos y muertes por Covid-19, miles de personas no sólo "le han perdido el miedo" al virus sino que además lo retan al acudir este fin de semana a la Central de Abastos previo a Día de Muertos; la administración es la más contenta con la congregación de gente, pues se refleja en ingresos.
“Llevo más de media hora para entrar a la Central de Abastos de Toluca, es terrible como la gente acude a realizar sus comprar pese a esta emergencia sanitaria. Esto es un foco de contagios, pues si vienen a comprar pero también de paso se llevan el virus”, mencionó Pedro Ramírez, vecino de la zona de Xonacatlán quien este sábado tuvo que asistir a este lugar para comprar algunos artículos, pero al final optó por regresar a su hogar.
Sin ninguna medida de seguridad inclusive muchos sin el cubrebocas, habitantes de distintos municipios del valle de Toluca asistieron a la Central de Abastos desde el pasado jueves con motivo de la venta de Día de Muertos.
“Son miles y miles de personas que han visitado este lugar y lo más grave es que ninguna medida sanitaria se ha aplicado, los únicos que están felices por esto es la administración, pues eso se refleja en dinero para ellos, sobre todo ya que se van a ir”, indicó uno de los condóminos.
Y es, dijo, si bien a los particulares no se les cobra si lo hacen con los camioneros, vendedores y quienes transportan productos diversos.
“Estas fechas son su agosto para ellos y por eso mientras más gente venga, ellos ganan más. Ellos son los más beneficiados, mientras que la gente la afectada, pues sin lugar a dudas habrá muchas personas contagiadas y quizás hasta muertas en unos días”, añadió otro de los comerciantes.
La circulación vehicular, refirieron, es a paso lento, es casi imposible entrar y salir de la Central de Abastos. De hecho, informaron, todas las plumas están abiertas y ni así pueden salir todos los vehículos.
Cuestionaron la presencia de las autoridades sanitarias para evitar este tipo de congregaciones masivas y recriminaron el no otorgar el permiso para celebrar una asamblea para comenzar con la renovación de la mesa directiva actual.
“Porque no vienen las autoridades sanitarias y revisan cómo está operando la Central de Abastos, estos últimos días se han congregado miles y no permiten llevar a cabo una asamblea con todas las medidas sanitarias posibles”, declaró Alejandro Arizmendi.
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