A través de redes sociales, ciudadanos han lanzado la convocatoria para realizar una reforestación masiva en el Estado de México, con lo cual buscan frenar los efectos del cambio climático, ayudar en la captación de agua de lluvia a través de la infiltración y la recuperación de bosques que han sido devastados por los incendios forestales.
La convocatoria ha sido lanzada por organizaciones civiles diversas, entre ellas la Red de Vinculación Civil Murciélagos con sede en Zinacantepec, así como en varias redes de grupos de Facebook.
Ésta no es la primera vez que la iniciativa ciudadana lanza una convocatoria masiva de reforestación en la capital mexiquense, pues en 2019 ocurrió algo similar, lo que motivó a que la Protectora de Bosques del Estado de México (Probosque) realizara una jornada masiva. Para este año, no se ha informado si se replicará la medida.
Zona de Nevado de Toluca, prioritaria
La Red de Vinculación Civil Murciélagos anunció que la zona en la que se pretende realizar una jornada de reforestación será el Nevado de Toluca, sin embargo, todavía no han confirmado la fecha, ni la cantidad de ejemplares a plantar.
Datos de la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible del Estado de México indican que en esa área se ha perdido un 30% de la masa forestal desde el cambio de su estatus legal, que pasó de Parque Nacional Nevado de Toluca para convertirse en Área de Protección de Flora y Fauna en octubre de 2013.
Esta recategorización impulsada en el gobierno del entonces presidente de México Enrique Peña Nieto, tenía la finalidad de abrir la posibilidad para que las comunidades aledañas participaran en proyectos de aprovechamiento sustentable.
El Nevado de Toluca, además de albergar distintas especies de flora, es el hogar de ardillas, aves, conejos, coyotes, reptiles, roedores, teporingos y tlacuaches, entre otros.
Incendios consumen bosques del Edoméx
Entre el primero de enero y el 4 de abril de este año se habían registrado 615 incendios forestales en el Estado de México, según datos de Probosque.
Estos incendios causaron afectación en 15 mil 664.12 hectáreas (has) de las cuales, 14 mil 131.84 has correspondían a pastizales y arbustos (90.2%), 1,309.28 has afectaron el renuevo (8.35%) y 223.00 has de arbolado adulto (1.42%).
Los municipios con mayor número de incendios en el periodo referido fueron Ixtapaluca con 52 incidentes y una afectación en 1,452.29 has, Ocuilan con 44 incendios y afectación en 814.80 has, Nicolás Romero con 42 incendios y afectación en 120.00 has, Villa del Carbón con 36 incendios y una afectación en 108.00, así como Villa Victoria con 26 incendios y una afectación en 46.50 has.
Mientras que los municipios con mayor afectación fueron Jilotzingo con una afectación de 2,191.00 has derivado de 11 incendios, Ixtapaluca con una afectación de 1,452.29 has con el acumulado de 52 incendios, Coatepec Harinas con 1,384.10 has afectadas por 14 incendios, Isidro Fabela con una afectación en 1,345.94 has derivado de 6 incendios, así como Ocuilan con una afectación en 814.80 has derivado de 44 incendios.
Regeneración del suelo afectado
Para reforestar una área afectada por un incendio forestal, es necesario esperar el inicio de la temporada de lluvias, coincidieron elementos de Protección Civil Municipal de Naucalpan y Tlalnepantla.
“Lo deseable es empezar haciendo un trabajo para contener la posible erosión. Y lo habitual es esperar al menos un año antes de reforestar,” explica el director de Protección Civil y Bomberos de Naucalpan, Moisés Minquini Matilde.
Tras registrarse un siniestro forestal, inicialmente se debe evaluar el riesgo de pérdida de suelo, porque es la base de todo; la lluvia y el viento arrastran las capas más superficiales, que son las que contienen la materia orgánica.
“Se puede proteger el suelo con los propios restos quemados, troceados y esparcidos, o colocados a modo de barreras para contener el suelo”, explicó el jefe de bomberos.
Por separado, Fabricio Montiel, director de Protección Civil en Tlalnepantla, precisó que entre los efectos de los incendios forestales destacan la pérdida de flora y fauna, así como la degradación y erosión del suelo, aunado a la contaminación del agua.
Entre las diversas acciones que pueden realizarse para disminuir los efectos negativos al suelo, destacan la construcción de pequeñas presas en los arroyos para retener los sedimentos, sembrar herbáceas que cubran el suelo y eviten la erosión e incluso arrojar paja desde helicópteros.
Luego de un incendio, lo deseable es que se haga un trabajo para contener la posible erosión. Lo habitual es esperar al menos un año antes de reforestar o de autorizar reforestacionesFabricio Montiel
Los entrevistados coincidieron en que para que ocurra la regeneración del suelo afectado tras un incendio forestal, es necesaria la prevalencia de semillas o plantas vivas, pero aclararon que no todas las especies tienen la misma capacidad de recuperación tras un incendio.
Ambos cuerpos de bomberos cuentan con programas de reforestación que darán inicio con la temporada de lluvias de este año.
De acuerdo con el Servicio Meteorológico Nacional (SMN), a partir de este viernes 19 de abril el calor comenzará a ceder para darle paso a la probabilidad de lluvias en el Estado de México.
Los recursos con que cuentan las dos corporaciones fueron asignados en el presupuesto del ejercicio fiscal de este año, sin embargo, se considera que, aún cuando no son suficientes, se han atendido incendios y emergencias, con el apoyo de otros cuerpos de bomberos, entre ellos el de la Ciudad de México.