El primer grupo de pelícanos blancos que llegan cada año al Lago de los Lirios en Cuautitlán Izcalli, Estado de México, ha iniciado su avistamiento durante esta temporada por su migración natural, y lo hace durante el mes de noviembre buscando zonas más cálidas durante el invierno.
El ecólogo de fauna silvestre y vecino del fraccionamiento Bosques del Lago, Martín Solano, explica que muchas veces los colonos de los fraccionamientos que se localizan alrededor del parque, como Cumbria, Atlanta, Arcos del Alba y Bosques del Alba, realizan jornadas de limpieza para conservar el lago de los Lirios.
Cada año llegaban entre 500 y mil pelícanos blancos americanos al municipio y se estima que la cifra ha bajado en un 50% debido a la contaminación.
La Presa de Guadalupe es otra área lacustre donde arriban estas aves y que es un fenómeno que ocurre de manera regular durante los meses de noviembre a marzo, coincidiendo con su migración anual.
Estas aves migratorias, específicamente los pelícanos blancos americanos, viajan desde el norte de Estados Unidos y Canadá hacia el sur, en busca de climas más cálidos y fuentes de alimento accesibles durante el invierno.
Los cuerpos de agua cercanos al Valle de México les ofrecen un entorno ideal para descansar y alimentarse gracias a factores como: la disponibilidad de alimentos, condiciones climáticas, seguridad y tranquilidad.
Los pelícanos se alimentan principalmente de peces, y en estos lagos encuentran una buena cantidad de ellos, mientras que el clima de la región durante el otoño e invierno es templado, lo que resulta favorable para las aves.
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El lago es un lugar tranquilo donde los pelícanos pueden descansar después de largos trayectos y es un fenómeno que se ha convertido en un atractivo para la zona, ya que la presencia de estas majestuosas aves resalta la importancia de conservar estos espacios naturales y protegerlos de la contaminación.
Martín Solano hizo una invitación a los habitantes de los municipios del Valle de México a que acudan a Cuautitlán Izcalli, porque, dijo, es un espectáculo único que conecta con los ciclos naturales de la vida silvestre
Contaminación
El ecólogo asegura que, a pesar de la contaminación en el Lago de los Lirios, los pelícanos blancos aún llegan a esa área porque son aves bastante adaptables y pueden buscar alimento en diferentes entornos, incluso en aquellos que no son ideales.
Sin embargo, la contaminación puede afectar su salud y la de otras especies en el ecosistema, por eso, es importante que las autoridades estatales, municipales y federales sigan trabajando en la conservación y limpieza de estos cuerpos de agua para asegurar un hábitat saludable para todas las especies.
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