Cuautitlán, México.- Ante el arribo de más de 300 mil peregrinos que llegarán a este municipio a visitar la casa de San Juan Diego, la policía municipal de Cuautitlán Izcalli pondrá en marcha el operativo de vigilancia y vialidad “El Cerrito”, que iniciará el próximo domingo 10 de diciembre cerca de la medianoche y permanecerá hasta el jueves 14 del mismo mes, en aras de proporcionar a la comunidad las medidas de seguridad para la celebración de sus fiestas religiosas.
Habitantes y visitantes en torno al Santuario de El Cerrito contarán con la presencia de uniformados durante estos días, en los que se incrementa notablemente la afluencia de personas para llevar a cabo diferentes actividades eclesiásticas.
Para agilizar el tránsito vehicular en la zona, personal de la Comisaría estará operando en las arterias principales dando acceso al paso, así como ofreciendo vías alternas para evitar congestionamientos en los días críticos que son el 11 y 12 de diciembre.
En los límites de Izcalli y Cuautitlán México se encuentra el patrimonio arqueológico de lo que fuera la casa del ahora santo Juan Diego, que vio por primera vez a la Virgen de Guadalupe en aquel cerrito del Tepeyac y quien recibiera de ella las señales para demostrar al entonces obispo Fray Juan de Zumárraga la existencia de la Madre de Jesús.
Cada diciembre, miles de feligreses muestran su fe ante la Virgen Morena, pero igual ante San Juan Diego, por lo que a partir de la última semana de noviembre y hasta el 12 de diciembre no se hacen esperar las muestras de fe y devoción en este lugar.
La ermita del “indio” de Cuautitlán consta de una iglesia y el Museo Casa de Juan Diego que desde hace más de 10 años se intentaba terminar, pero que ahora está listo para recibir a por lo menos cuatro mil fieles cada año.
Desde el 27 de noviembre y hasta el 8 de diciembre, todos los días la imagen de la representación de la aparición sale a recorrer las calles de los pueblos y barrios de Cuautitlán, y el 9 de diciembre se realizan los ordenamientos por el obispo de la región.
Las creencias religiosas aseguran que en el templo y casa del que es santo desde 1992 y canonizado por el Papa Juan Pablo II, el milagro de la sanación existe.
“Yo he visto entrar a muchas personas enfermas, pero con la fe en Juan Dieguito, le aseguro que salen renovados”, platicó el señor Fabián Lino, quien es el encargado de la seguridad interna del templo.