Con un saldo de 33 taxis y 10 autobuses infraccionados, culminó el primer operativo contra el transporte público efectuado en la capital mexiquense.
Recordar que fue ayer que se anunció la estrategia por parte del gobierno municipal para retirar de circulación las unidades no verificadas.
Tras el anuncio del alcalde Juan Rodolfo Sánchez, hecho el martes como medida emergente para reducir la contaminación en Toluca, desde las primeras horas de este miércoles se desplazaron los operativos en al menos cinco puntos de la ciudad.
Los retenes fueron colocados en el cruce de la Maquinita, en la colonia Ángeles, sobre la avenida Isidro Fabela, en la Excama de Piedra y en la antigua estación del tren en la colonia Ferrocarriles Nacionales.
Así como en la zona de la terminal, en la avenida 5 de Mayo, junto al parque del mercado Benito Juárez, el Monumento a la Bandera, sobre la avenida Miguel Hidalgo, en Heriberto Enríquez, a la altura de Venustiano Carranza.
Los operativos comenzaron desde las 9:00 horas y se extendieron hasta las 16:00 horas en algunas zonas.
El punto más conflictivo fue la Excamada de Piedra, en la avenida Adolfo López Mateos, donde se generó un enfrentamiento entre policías y un grupo de taxistas provenientes de Almoloya de Juárez.
Alrededor de las 13:30 horas, el enfrentamiento tuvo lugar, y en él resultaron lesionados al menos cuatro taxistas, dos de ellos de gravedad con golpes en la cabeza y cuerpo.
Asimismo, hubo dos policías lesionados, quienes presentaban golpes en la cabeza y manos.
Al lugar arribaron alrededor de 150 elementos de la policía municipal, quienes protagonizaron el enfrentamiento contra los taxistas para luego retirarse del lugar.
A manera de protesta, un grupo de 100 choferes bloquearon ambos sentidos de la avenida Adolfo López Mateos, ahorcando por completo la circulación de vehículos.
Los taxistas colocaron piedras y troncos para impedir que los autos pasaran, lo que provocó que la zona colapsara.
Los taxistas provenientes de Almoloya de Juárez, Zinacantepec y Villa Victoria, exigieron la presencia del alcalde Juan Rodolfo Sánchez Gómez, para que explicara la razón de las agresiones.