Madres de víctimas de feminicidio se manifestaron este martes frente al Tribunal de Justicia del Estado de México, en la plaza de los Mártires de Toluca, para exhibir los casos en que los jueces mexiquenses han otorgado a los victimarios reducción de sentencias.
Las familias colocaron lonas con los rostros de víctimas de feminicidio en los que ha ocurrido reducción de sentencias.
Con la leyenda “Los ojos de nuestras hijas juzgarán las apelaciones de este tribunal. No a la reducción de sentencias”, las madres de las víctimas reprocharon que además de perder a sus hijas, deben aceptar la reducción de sentencias.
Gloria Reyes Ruíz, madre de Salma Andrea, víctima de feminicidio, señaló que en el caso de su hija hay una sentencia de 62 años, pero hay un recurso de apelación por parte del presunto agresor.
“Queremos saber de qué forma el Poder Judicial está evaluando esas reducciones y lo que queremos es que se mantengan esas sentencias”, expuso la madre de Salma.
Otras madres, quienes también cuentan con una sentencia a favor de sus hijas, se hicieron presentes en la protesta frente al Poder Judicial.
“El agresor de mi hija fue asesinado al interior del penal, pero hay varios casos de compañeras en los que les han reducido las sentencias y por eso estamos aquí”, señaló Karen Reyes, madre de Renata Martineli Reyes, víctima de feminicidio el 29 de noviembre de 2020 en el municipio de Ixtapaluca, cuando ella tenía 13 años.
A Renata la asesinó la ex pareja de Karen cuando ingresó a su domicilio donde abusó de ella y la estranguló, relató la madre de la víctima.
Antonia Alemán Andrade, madre de Sandra Karina García Alemán, víctima de feminicidio el 18 de mayo del 2020 en el municipio de Temascalapa, también se hizo presente en la protesta, pues teme que le revoquen la sentencia vitalicia que se otorgó a favor de su hija.
“A varias mamás que conozco les han reducido la sentencia de sus casos y pues a mí no me gustaría que ocurriera algo así con la sentencia que se le dictó al agresor de mi hija”, señaló la madre activista.
Antonia explicó que el feminicidio de su hija las autoridades mexiquenses lo quisieron hacer pasar como una congestión alcohólica, pero los peritajes posteriores arrojaron que la joven falleció por estrangulamiento.
“Este acto que estamos haciendo es para exigirle a los magistrados que son encargados de las apelaciones de nuestras hijas, pues que no las reduzcan, que se queden como tal y por el contrario, que se les aumenten por haber hecho ese acto tan cruel”, expuso Alemán Andrade.
Antonia explicó que, al igual que otras madres, están en proceso de apelación de las sentencias de sus hijas.
Las madres de las víctimas pintaron ojos en cartulinas como parte del performance y las colocaron sobre la plancha de la plaza, otras las colgaron en un tendedero, junto con las lonas en las que ilustraron, los rostros de sus hijas.