El mantenerse en color naranja en el semáforo de alerta epidemiológica en la entidad, o el avanzar en el mismo, es una tarea conjunta entre todos los sectores involucrados y la ciudadanía.
Así lo señaló, el subdirector de Epidemiología del Instituto de Salud del Estado de México (ISEM), Víctor Durán Mendieta, quien exhortó a la población no bajar la guardia en las medidas sanitarias y de higiene.
Es de mencionar que el Estado de México desde el pasado 20 de julio se encuentra en tonalidad naranja y esta semana continuará en esa fase.
El funcionario de la secretaría de Salud estatal, explicó que la transición del semáforo rojo al naranja son varias las recomendaciones a seguir.
Comentó que fue difícil llegar a esa fase y mantenerse o aspirar a los próximos colores depende de múltiples factores, de la participación conjunta de varios sectores, gobiernos y de la ciudadanía.
“Va a depender mucho de lo que cada uno de nosotros como ciudadanos hagamos y aportemos, usar cubrebocas de forma permanentemente de forma correcta”.
De igual manera, sugirió el lavado frecuente de manos con agua y jabón o en su defecto con gel antibacterial.
No tocarse la boca, nariz y ojos, porque es posible que previamente se manipulen infinidad de objetos y en algunos de ellos estén adheridos al virus, expresó.
Otra recomendación, agregó, es acudir a un servicio de salud si presenta signos de enfermedad respiratoria.
“Hay que solicitar atención médica lo más pronto posible aquí los minutos valen oro porque mientras más pronto recibamos atención médica vamos a prevenir complicaciones y eventualmente evitar la muerte”.
En las siguientes fases del citado semáforo, es decir, la amarilla y verde, comentó será un refuerzo de lo hecho en la etapa color naranja.
Se continuará, anticipó con el uso de cubrebocas permanente fuera del hogar, colocar señalamientos para establecer la sana distancia entre persona y persona, de por lo menos 1.5 metros de distancia.
En los centros laborales, persistirá el uso de cubrebocas, careta, protección ocular, lavado de manos continúo y la separación de espacios físicos con acrílicos.
Persistirán, dijo los filtros de ingreso con la toma de temperatura corporal, y de detectar alguna persona con síntomas de enfermedad respiratoria deberá regresar a su casa.
Recordó que el aforo máximo en etapa naranja será del 30% en plazas comerciales, establecimientos, empresas y en los servicios religiosos para garantizar la sana distancia y evitar el contacto físico.
En dichos sitios se debe tener dispensarios de gel antibacterial al ingreso y respetar la capacidad de las personas.
En el caso de los servicios religiosos indicó que el aforo lo determinarán las autoridades eclesiásticas.
“Si tengo bancas para 100 personas voy a dar acceso a 30 personas al establecer un mecanismo de persona de estos espacios, y se limitará el acceso, apelamos a la compresión de la ciudadanía”.
Cabe recordar que la semana pasada se retomaron en la entidad dichas actividades tanto comerciales, religiosas, de la industria manufacturera y la activación física en espacios abiertos.