Al menos 500 patos han muerto en lo que va de este mes en el Lago de Guadalupe, ubicado en el municipio de Cuautitlán Izcalli, a causa de un brote de gripe aviar y enfermedad de Newcastle.
Autoridades municipales informaron que a principios de diciembre detectaron la muerte de algunos patos hallados en el Lago de Guadalupe, por lo que fue necesario hacer un estudio en mencionado lago y por consiguiente realizarles necropsia a los patos por medio del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (SENASICA).
De acuerdo al estudio realizado a nueve patos, seis murieron por fiebre aviar y tres de ellos por Newcastle, ambas enfermedades están muy emparentadas, sin embargo, las autoridades informaron que no hay ningún riesgo de contagio a los seres humanos.
De principios de diciembre a la fecha se han detectado 500 muertes de patos por estos brotes, así lo informaron las autoridades.
El director de Medio Ambiente, Gabriel Saavedra, hizo un llamado a la ciudadanía para no visitar el lago, ya que hasta el momento se encuentran realizando estudios por parte de investigadores de la UNAM.
Argumentó que la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) y el Centro Nacional de Diagnóstico y Salud Animal (CENASA) solicitaron el diagnóstico ante la posible existencia de alguna otra bacteria que esté acabando con la vida de los animales.
La fiebre aviar y la enfermedad de Newcastle tienen tres niveles de velocidad de contagio: intensa, rápida y baja. El director Saavedra puntualizó que, de acuerdo a lo que ha estado pasando, se encuentra en fase intensa, por lo que se habla de un contagio grave y de un 90 por ciento de muerte en las aves.
Por ello, como medida de seguridad, el Ayuntamiento de Cuautitlán Izcalli a través de la Dirección de Medio Ambiente ha comenzado a cercar los lugares donde las aves han sido recogidas, para evitar el contagio de más aves y que pueden perder la vida.
El Lago de Guadalupe es un depósito de aguas residuales, en donde hay descargas domiciliarias, ante esto el alcalde Ricardo Núñez invitó a la ciudadanía a no arrojar residuos sólidos al lago para evitar algún brote de este tipo.