Ante la víspera de Navidad y Año Nuevo, la Arquidiócesis de Toluca informó que tiene programadas varias misas para los fieles en diferentes horarios.
De acuerdo con información oficial, las misas serán oficiadas por el párroco Héctor Regil, de la siguiente manera: el día 24 se realizará a las 10:00, 14:00, 19:00 horas y 20:30 horas; mientras que el 25 de diciembre serán tres misas de Navidad a las 12:00, 13:00 y 14:00 horas.
En cuanto al 31 de diciembre, las eucaristías tendrán los siguientes horarios: 10:00, 12:00, 14:00 y 20:30 horas. En tanto que el 1 de enero de 2024, se efectuarán misas a las 12:00, 13:00 y 14:00 horas.
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Para la Arquidiócesis de la capital mexiquense, el presente periodo decembrino y de fin de año resulta un momento propicio para fortalecer las virtudes morales en las familias mexiquenses, porque son esenciales para las relaciones humanas y el orden social.
“Dichas virtudes, se encuentran asociadas también a las virtudes teologales, y deben ser un punto de referencia para la orientación de la conducta de la persona hacia una plena humanización, así como hacia la construcción de una sociedad más justa y sana”, externó.
Asimismo, destacó la importancia no solamente en esta época de Navidad, sino en todo el año para se fortalezcan las siguientes virtudes: La prudencia, la justicia, la fortaleza y la templanza, porque todas ellas se complementan con las virtudes teologales, que son la fe, la esperanza y la caridad.
“Durante este periodo del año, la prudencia representa una virtud que tiene como propósito enmendar o sanar la ignorancia de entendimiento. Esta virtud nos brinda la capacidad de reflexionar antes de hablar o actuar, así como de evaluar el modo y los medios adecuados para intervenir en una situación”, sostuvo la Arquidiócesis de la capital mexiquense.
También la iglesia católica recomendó los siguientes pasos para gozar de una Navidad diferente: Escribir cuáles han sido las ausencias o pérdidas que se tuvieron durante el año en curso, cuáles han sido las principales enseñanzas y aprendizajes que cada pérdida dejó y meditar unos minutos leyendo la palabra de Dios.