Toluca, México.- Betsabé Ivette Morán Alcántara, licenciada en Ciencias Políticas y Administración Pública por la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM), destacó la importancia de que los jóvenes conozcan los protocolos de seguridad que deben implementar una vez que hacen uso de las redes sociales, ya que llegan a proporcionar diferentes datos personales, con todo el riesgo que ello implica.
Para la especialista en redes sociales, no debe dejarse de lado que son los jóvenes los que hacen un importante uso de las nuevas tecnologías, pero sin tomar en consideración que se trata de un rubro “poco vigilado por la autoridad”.
Cabe mencionar que para los especialistas en el tema, el mayor riesgo lo corren los jóvenes de 12 a 18 años de edad, para quienes es muy importante hacer uso de los nuevos mecanismos tecnológicos, porque consideran que en esa medida tendrán una mayor aceptación a nivel social.
Datos preocupantes
Actualmente, los denominados cibercriminales tienen una gran cantidad de datos de los que aprovecharse, ya que se estima que un 33% de los menores revela información sobre las pertenencias de sus padres (36%) o proporcionan información sobre el trabajo de sus progenitores (33%). Incluso, una quinta parte habla sobre el salario de éstos (23%).
Y aún existen riesgos más graves si tenemos en cuenta que un 17% de los niños de entre 8 y 16 años pretenden aparentar tener más años y uno de cada diez (10%) la altera dependiendo de la página web que estén usando. Por ello, este escenario provoca que los niños y jóvenes sean vulnerables ante adultos.
Para Morán Alcántara, el mal uso de las redes sociales en una etapa de "especial vulnerabilidad" como la niñez y la adolescencia puede agravar las situaciones de acoso escolar a través del ciberbullying o ciberacoso.
Lo anterior, abundó, representa el hostigamiento a través de insultos, amenazas, envío reiterado de correos a alguien que no desea recibirlos, las humillaciones, la distribución de fotos trucadas, la suplantación de la identidad contra una persona a través de tecnologías interactivas, básicamente Internet y la telefonía móvil.
Recomendaciones:
En caso de existir ciberacoso o ciberbullying, los investigadores recomiendan agotar todas las vías de comunicación entre los afectados, sobre todo de los padres, representantes y/o maestros(as) para encontrar soluciones que eduquen a las y los jóvenes, pues en muchas oportunidades estos casos suceden debido a la desinformación y a la ausencia de mediación adulta.
Aunado a ello, no se trata de negar el acceso a Internet a los niños, sino de educarlos para crear una cultura de un uso responsable de las herramientas tecnológicas.
Finalmente, Deben difundirse protocolos de seguridad. De ahí la importancia que los maestros o profesores estén siempre atentos para su detección y prevención ya que las víctimas, en general, sufren de manera silenciosa.