Niegan padecimientos respiratorios relacionados con la contaminación ambiental

Repuntaron casos de gripes hasta un 30% con las bajas temperaturas

Sandra Hernández | El Sol de Toluca

  · domingo 5 de enero de 2020

Foto: Moisés Pablo | Cuartoscuro


Hasta ahora, en el Estado de México no se tiene registrados casos de enfermedades respiratorias u de otro tipo relacionadas con la contaminación ambiental; sin embargo, las autoridades harán el estudio correspondiente, el cual darán a conocer en su momento.

De acuerdo con información del Instituto de Salud de la entidad (ISEM), los casos de padecimientos respiratorios registrados en esta temporada únicamente se encuentran relacionados con las bajas temperaturas.

Por tal motivo, la gripe ha repuntado entre un 15 y 30% en los últimos días.


Recomendaciones ante contingencia ambiental

En lo que corresponde a la incidencia de enfermedades relacionadas con la contingencia ambiental que fue declarada el pasado primero de enero y levantada un día después, podrá conocerse en las próximas semanas, una vez que concluya la recopilación de la información epidemiológica correspondiente.

Al respecto, el ISEM realizó las siguientes recomendaciones ante la posibilidad de una nueva contingencia ambiental:

  • Evitar las actividades al aire libre.
  • Tener especial cuidado de niños, adultos mayores y personas con padecimientos crónicos.
  • Acudir a consulta con un oftalmólogo para diagnosticar alguna afectación o resequedad, comezón, irritación, visión borrosa, ardor y lagrimeo.
  • Usar jabón neutro durante el aseo facial para evitar síntomas como resequedad, irritación o enrojecimiento de piel.
  • Evitar automedicarse
  • Si se realizan trabajos y actividades físicas al aire libre, se debe utilizar protector solar
  • Acudir a la unidad de salud más cercana


Padecimientos por contaminación

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la contaminación del aire representa un importante riesgo medioambiental para la salud.

Entre las enfermedades que se presentan a consecuencia de ello, se encuentran: problemas bronquiales, enfermedad obstructiva crónica, asma, cáncer de pulmón, derrame cerebral, hipertensión, arterosclerosis y padecimientos neurodegenerativos, como el parkinson y alzheimer.