“Hay desabasto y no sabemos cuándo nos llegará su medicamento”, es la respuesta que encuentra la población derechohabiente del ISSEMyM que acude a la farmacia de la clínica Alfredo del Mazo y recibe la noticia de que no le pueden surtir su medicina.
Caras de enojo, tristeza y frustración se pueden ver a las afueras de la farmacia localizada sobre avenida José María Morelos, debido a que a la gran mayoría de derechohabientes no les surtieron sus recetas.
Durante un recorrido realizado por esta farmacia se constató que no hay medicinas suficientes para surtir las recetas de la población derechohabiente, principalmente adultos mayores que hasta en muletas acuden por medicamentos y no los encuentran.
De 10 personas que acudieron la mañana de este miércoles, nueve eran adultos mayores y sólo a dos les surtieron parte de su receta médica, los ocho restantes tuvieron que regresar a sus casas con las manos vacías.
Derechohabiente rompe receta
El coraje y enojo de una derechohabiente, al no recibir su medicina, la llevó a romper su receta y tirarla al bote de la basura, ante la mirada de otros derechohabientes que entraban ilusionados con su receta médica.
“Sí dan ganas de romper la receta, pues llegas a la farmacia y no hay, ni siquiera te dicen cuándo van a llegar. No hay otra opción que comprarlas”, mencionó un derechohabiente del ISSEMyM que acudió a esta farmacia a preguntar por su medicamento.
La gran mayoría de los derechohabientes simplemente se fueron con sus manos vacías y sólo algunos que corrieron con suerte llevaban algunas pastillas para por lo menos comenzar su tratamiento.
“Me dieron un medicamento, pero los otros dos no. Sólo me dijeron que no sabían cuándo y que anotará los teléfonos para que desde casa preguntara a ver si ya habían llegado”, añadió otro de los derechohabientes que acudieron a la farmacia referida.
Y efectivamente, a la salida de la misma, se encontraban dos hojas con los teléfonos correspondientes y con un horario de atención de lunes a viernes de 07:00 a 21:00 horas, además de sábados y domingos de 07:00 a 20:00 horas.
“A mí me dijo la persona que nos revisa la receta que hay desabasto, pero no saben cuándo van a llegar las medicinas. Nosotros no tenemos la culpa, pues nos descuentan cada quincena, no es justo”, añadió otra de las derechohabientes.
Este desabasto ha propiciado que la farmacia de esta clínica luzca vacía y sin personas formadas esperando por su medicamentos, ya que, como van llegando, prácticamente son rebotados debido a que no hay medicamento.
“A mi hermana la operaron hace poco y solo nos dieron diclofenaco, todos los demás medicamentos, como antibióticos y hasta omeprazol, los tuvimos que comprar porque no había”, manifestó otra derechohabiente proveniente de Zinacantepec.