"Nosotros qué culpa tenemos": chofer varado en el bloqueo del Arco Norte

Alejandro, al igual que cientos de conductores, han pasado casi 50 horas en esta vía, mientras los ejidatarios de varios estados esperan que el gobierno les pague por sus tierras utilizadas para la construcción de esta vía.

Fernando Solís / El Sol de Toluca

  · jueves 20 de junio de 2024

Una patrulla resguarda un campamento improvisado por los ejidatarios a un costado del Arco Norte. Cortesía / Guardia Nacional

Desde hace tres días una fila kilométrica de vehículos, en su mayoría de carga, es el único escenario que observan los cientos de conductores que quedaron varados en la autopista Arco Norte, en la zona limítrofe del Estado de México e Hidalgo.

Muchos no se conocen y lo único que tienen en común es que quedaron atrapados por comuneros que levantaron barricadas e impidieron que llegaran a su destino para entregar sus mercancías en los estados de Hidalgo, Puebla, Tlaxcala y la Ciudad de México.

El reloj marcaba las nueve de la mañana del lunes. Con un buen tiempo, Alejandro, operador de un tráiler que desde hace más de 15 años se dedica al transporte de mercancías se dirigía como muchas veces hacia el estado de Tlaxcala, de buen humor escuchaba su música favorita.

Con barricadas bloquearon el Arco Norte | Cortesía / Luis Trejo

Minutos antes de la 10:00 de la mañana se encontró con varios vehículos detenidos, no eran muchos. Pensando que se trataba de un accidente descendió de su unidad para preguntar qué había pasado y tal vez dar apoyo.

Otros operadores, le indicaron que se trataba de un bloqueo de ejidatarios; contrariado regresó a su unidad y encendió un cigarrillo dispuesto a esperar lo que pensó serían por poco tiempo.

Sin embargo, las horas pasaron, la cajetilla de sus cigarrillos se terminó, por la tarde salió para lavarse los dientes y se percató que en esas horas se acumularon más y más vehículos en su mayoría transportistas.

Cayó la noche y el agua que llevaba para beber, así como algunas golosinas, cacahuates y pepitas se habían terminaron. Su mal humor está acompañado por hambre, por lo que decidió reclinar su asiento y seguir esperando.

Sin darse cuenta, se quedó dormido y para la mañana del martes, de mal humor, porque estaba adolorido, bajó de su tráiler solo para darse cuenta que el bloqueo continuaba y su hambre había crecido, para entonces ya pasaban más de 20 horas.

Algunos de sus compañeros que corrieron con la suerte, le indicaron que los ejidatarios estaban dando café y algo de comer, por lo que se acercó y ahí se enteró que el bloqueo era porque a 18 años de que fueron tomadas sus tierras para construir la autopista, no les han pagado.

“Nosotros qué culpa tenemos”, dijo mientras escuchaba a unos de los comuneros asegurar que si no les pagaban, la autopista continuaría “tapada”. Luego de terminar su café, regresó a su unidad.

Para la tarde-noche del martes, la sed combinada con el hambre había arreciado. Para distraerse revisó celular. En ese momento le tocaron la portezuela. Al asomarse, sorprendido, se dio cuenta que era gente de la zona que llevaban tortas y agua para obsequiarlas a quienes se encontraban atrapados.

Alejandro fue uno de los afortunados que logró continuar su camino, cuando por momentos los comuneros permitieron el paso a algunos vehículos.

Reclaman que se permitió acumulación de vehículos

Entre las personas que participaron en el bloqueo, se encontraba una mujer que de reojo observaba a quienes grababan videos y a las personas que decían ser reporteros y estaban documentado.

Con un poco de recelo se acercó a uno de ellos, “Es usted de los medios”-preguntó”, la respuesta fue afirmativa.

La mujer que vestía una chamarra con gorra para protegerse del frío, dijo llamarse Elsa Islas, y pidió ser escuchada. Relató que mediante las redes sociales la gente acusó que los comuneros tenían secuestrados a choferes, a familias, a niños, a adultos mayores y hasta señoras embarazadas.

“Eso es mentira, así como a ustedes le dijimos, pasen, tomen un café porque hace frío, lo hemos hecho con los transportistas desde que iniciamos en esta área (km 148), hubo momentos en que dejamos libre la circulación para permitir el desahogo de la autopista y que la gente no se quedara atrapada en el Arco Norte”; dijo, al reportero de una conocida televisora.

La mujer luego de tomar un respiró continuó y acusó a los efectivos de la Guardia Nacional (GN), división carreteras, así como al personal de las Plazas de Cobro. Aseguró que les dijeron que ya estaba cerrada la vialidad, pero dejaron que más y más vehículos continuaran circulando.

La mujer, que aseguró ser una ejidataria, señaló que el tránsito vehicular seguía fluyendo ya que el cierre ha sido intermitente al permitido por algunos momentos que los vehículos continúen su camino.

“El tráfico no se ha quedado varado por completo, no somos inhumanos, tampoco estamos armados, no tenemos a nadie atado; tampoco a ningún muerto en nuestras manos gracias a Dios, pedimos que desmientan todo esto”, dijo.

Falta poco para conocer el resultado de la reunión con los representantes de los gobiernos federal y estatal, señaló la mujer y afirmó que no es la primera vez que dan a conocer su inconformidad.

Además, aseguró que son un grupo de hombres y mujeres unidos y que seguirán en el lugar hasta que sus compañeros les indiquen que es hora de retirarse.