A poco menos de dos meses de que concluya el año, el Poder Judicial del Estado de México otorgó 437 brazaletes electrónicos a personas en libertad provisional. En tanto, la reincidencia en la comisión de algún delito de quienes se encuentran en esa situación es del 0.2%, informó el presidente de ese poder, Ricardo Sodi.
Expresó que el programa ha sido útil para despresurizar los centros penitenciarios mexiquenses y agregó que dichos dispositivos electrónicos se han utilizado o asignados como una medida cautelar en sustitución de la prisión preventiva.
“Hemos otorgado este año alrededor de 437 brazaletes electrónicos, este artilugio electrónico tiene ventajas y desventajas”.
Con el dispositivo, explicó, las personas que cometieron un ilícito puede estar en libertad provisional y no sufrir prisión preventiva que es la última opción en el sistema de justicia penal; no obstante, reconoció que algunos de estos ciudadanos han tratado de realizar violaciones a la pulsera.
“El 0.2% son los que reinciden. En términos generales considero que es un proyecto exitoso que permite una alternativa de prisión preventiva con mucho margen de seguridad”.
Sin embargo se necesita disponibilidad de los dispositivos y que la tecnología avance para evitar alteraciones o manipulación de la misma y de ser así, el caso se localice a los justiciables, comentó.
Subrayó que el Poder Judicial otorga los brazales; pero quien los administra es la Secretaria de Seguridad estatal. En ese sentido, opinó que sería necesario destinar mayores recursos al programa para contar con más dispositivos.
“Es un tema que no tengo a la mano porque no lo administro, el programa lo administra la Secretaría de Seguridad, el sistema penitenciario, pero no el Tribunal Superior de Justicia del Estado de México”.
Destacó que el programa permite la despresurización de las cárceles lo cual es un tema importante. Esto porque la política criminal se ha basado en el incremento de penas de manera poco estudiada y poco reflexiva, analizó.
“Incrementar las penas no inhibe la incidencia delictiva puede poner la pena que sea, para el homicidio, la gente seguirá cometiendo homicidio”.
Al respecto, externó que habría que replantearse el sistema penal y el Código Penal del estado de México para contar con penas más racionales.
De igual manera, que en las prisiones no estén delincuentes menores quienes pueden ser reeducados y seguir su proceso en libertad, añadió.
En la entidad se estima que el Sistema Penitenciario opera con sobrepoblación de más del 100% de su capacidad instalada.