Personas con enfermedades crónicas se deshidratan más rápido; pronostican cinco olas de calor

Puede conducir a un descontrol de los niveles de glucosa en la sangre que requerirán de atención médica

Sandra Hernández / El Sol de Toluca

  · domingo 31 de marzo de 2024

Ante las altas temperaturas es importante mantenerse bien hidratado. Foto | Cuartoscuro

Ante las intensas temperaturas que se seguirán presentando en todo el país, David Chávez, especialista en Endoscopía Gastrointestinal, advirtió que las personas que viven en condiciones crónicas de salud como la diabetes, se deshidratan con mayor rapidez.

Ante dicho escenario, el especialista médico externó que durante la época de calor la población general, pero especialmente los niños, adultos mayores y pacientes con enfermedades crónicas, están más predispuestos a adquirir infecciones gastrointestinales, urinarias y causadas por hongos, lo que puede conducir a un descontrol de los niveles de glucosa en la sangre que requerirán de atención médica.

“La primavera llegó a nuestro país acompañada de altas temperaturas, lo que implica una serie de cuidados especiales para todas las personas, especialmente aquellas que viven con condiciones crónicas como la diabetes”, señaló.

Los animales de compañía, al igual que los humanos, son susceptibles a sufrir golpes de calor. Cortesía / Gobierno de Toluca

Cabe mencionar que, para este año, el Servicio Meteorológico Nacional pronosticó un total de cinco olas de calor, que arribarán a nuestro país entre los meses de marzo a junio.

Por ende, en varios estados las temperaturas serán mayores a los 40 grados y en la Ciudad de México; por ejemplo, las temperaturas máximas serán de 30 a 35 grados centígrados, por lo que son necesarias medidas especiales para el cuidado de la salud.

Respecto a la importancia de los cuidados de la diabetes en esta temporada, David Chávez informó que las personas con diabetes tipo 1 y 2 sienten más calor que las personas que no viven con estas condiciones, debido a que ciertas complicaciones como el daño a los vasos sanguíneos y a los nervios pueden afectar las glándulas del sudor, de modo que el cuerpo no se puede enfriar con la misma eficiencia.

“Esto puede causar golpes de calor que se convierten en emergencias médicas. Además, las personas con diabetes se deshidratan con mayor rapidez; no tomar suficientes líquidos puede elevar el azúcar en la sangre, lo que causa que tengan mayor necesidad de acudir al baño y de esta manera se deshidraten”, indicó.

De igual forma, advirtió que las temperaturas altas pueden cambiar la forma en la que el cuerpo usa la insulina, por lo que será necesario que la persona con diabetes mida sus niveles de glucosa en la sangre con más frecuencia y ajuste su dosis de insulina, así como su dieta, siempre bajo la supervisión de su médico.