Pese a la falta de recursos y retrasos en los pagos de pensiones, el penúltimo año del anterior gobierno, el ISSEMyM hizo pagos indebidos, la adquisición indebida del servicio de vigilancia, además de exhibir una brecha salarial con una diferencia de hasta 23 veces entre el sueldo más alto y el más bajo.
El informe de la Cuenta Pública 2022 del Órgano Superior de Fiscalización del Estado de México (OSFEM) mostró también que en ese año el Instituto de Seguridad Social del Estado de México y Municipios no destinó recursos a programas de igualdad de género, prevención y atención a la violencia contra las mujeres.
Tampoco presentó todas las nóminas detalladas; por lo cual no se pudo determinar si el importe por sueldos correspondía al autorizado en el tabulador y hubo programas que no alcanzaron un cumplimiento del 90 al 110 por ciento en el recurso ejercido y las metas realizadas.
En total, el OSFEM hizo 17 observaciones al ISSEMyM y emitió pliegos de observaciones que están en etapa de aclaración.
Deuda
La deuda a corto y largo plazo aumentó de tres mil 821 millones 965 mil pesos en 2020, a cinco mil 511 millones 667 mil pesos en 2022, en su mayoría por cuentas por pagar a corto plazo.
Personal y salarios
Mientras en enero del 2022 había 10 mil 975 personas servidoras públicas, para diciembre sumaban 11 mil 959, es decir, 984 más.
La brecha salarial era de 23.1 veces entre el sueldo quincenal bruto más alto, que era de 97 mil 489 pesos, y el más bajo que ascendía a cuatro mil 217 pesos.
El Osfem no pudo verificar si los sueldos base de las personas servidoras públicas se ajustaron al tabulador, pues el instituto omitió presentar correctamente la información y no se pudo realizar el procedimiento.
Observaciones
Hubo 17 observaciones determinadas, pues el Órgano Superior determinó que el ISSEMyM no comprobó el uso y destino de todos los recursos, hubo subejercicios, pago por incompatibilidad, pago de más a pensionados.
Entre otras cosas el OSFEM presumió que la entidad pagó indebidamente recursos por concepto de deuda pública y autorizó la erogación para el pago de ADEFAS, es decir, de adeudos anteriores.
También se presume que adquirió indebidamente los servicios de vigilancia, sin presentar la evidencia documental comprobatoria justificativa para acreditar por qué se hizo por adjudicación directa.
Otros pagos indebidos habrían sido en servicios de alimentos, limpieza, desinfección, sanitización por no mostrar la evidencia documental para comprobar la prestación y entrega de esos servicios.
También hubo observaciones por subejercicios que afectaron al instituto, pago indebido en recursos para el uso y destino del suministro de combustible, pagos a pensionados que regresaron al servicio público sin comprobar el dinero entregado, entre otras.