El albergue Hermanos en el Camino, ubicación caso en la zona de Pilares en el municipio de Metepec, ha solicitado para la temporada de frío la aplicación de vacunas y en específico que se considera a menores de edad en las jornadas de vacunas contra Covid-19.
Armando Vilchis, encargado del albergue, informó que en temporada de frío se solicita el apoyo del sector salud para aplicar vacunas contra enfermedades estacionales como la influenza.
Sin embargo, dijo, este año no se ha logrado coordinador campañas de vacunación con el sector salud.
"No hemos podido tener acercamiento para aplicar vacunas", dijo el activista.
Dijo que en las campañas de vacunación contra Covid-19 que se han hecho durante este año, no se consideró a los grupos de migrantes que llegan por temporada al albergue.
En específico, señaló que ningún niño migrante ha recibido alguna de las dosis contra el virus, pese a que la vacuna es gratuita y universal.
Actualmente en el albergue Hermanos en el Camino hay solo dos menores de edad sin embargo, durante el año se ha recibido más de 30 infantes.
Vilchis explicó que la comunidad migrante es muy inestable y con movilidad, por lo que es más complicado programar campañas de vacunación.
Dijo que en otros años, el sector salud acude al propio albergue y aplica las vacunas para la temporada de frío, pero este año no se ha podido debido a que no hay apoyo por parte de la Comisión de Derechos Humanos del estado de México.
Hasta hace un mes tenían refugiados a unos 25 menores de edad.
"Hay muchos que solo van de paso, se abrió el mes pasado la frontera y se fueron todos, teníamos muchos niños, pero luego la cerraron y volvieron a llegar más (migrantes)", explica.
El albergue Hermanos en el Camino tiene nueve años abierto a los migrantes, su capacidad es para unas 80 personas pero en ocasiones sobrepasan su capacidad.
"En fin de año llegan muchos a pedir refugio, y aquí los recibimos, les tendemos unas cobijas en el piso y ahí se quedan", dice don Armando.
Según sus cálculos, el 25 por ciento de los migrantes centroamericanos que reciben, solo van de paso a la frontera norte. Pero el resto de quedan y son por quienes deben solicitar de forma permanente ayuda.
"Hay muchos migrantes que están en las calles, no los podemos contar pero al menos aquí, los que reciben nuestro techo, están fuera de peligro", afirma don Armando Vilchis.
Entre los meses de diciembre y enero, el número de migrantes el refugio aumentará hasta unos 80. Ellos se quedarán hasta enero y luego seguirán su camino a la frontera norte, dice.