La parroquia del Sagrado Corazón ubicada en la colonia La Presa y que pertenece a la Diócesis de Ecatepec fue el primer sitio que se habilitó como albergue que asila a 30 personas entre niños, adultos y adultos mayores. Los encargados del lugar, mediante cartulinas pegadas en las puertas solicitan la donación de varios artículos.
Entre las cosas que solicitan están: cinta canela, diurex, libretas para los menores que se encuentran refugiados y toman clases en línea. Entre los artículos más importantes que se necesitan es ropa para bebes y niños así como, leche en polvo, papillas; pañales para niños de entre uno y dos años, bebidas multivitamínicas y también juguetes.
Los enfermeros que acuden para revisar a los asilados solicitaron guantes de látex, lancetas, apósitos, tiras reactivas para checar la glucosa y tapabocas para niños. También solicitaron la donación de jeringas de 3 y 5 mls. pediatras y para adulto, insulina así como papel higiénico entre otros enseres.
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Las personas encargadas de los albergues en las parroquias Del Sagrado Corazón y Nuestra Señora del Carmen, ambas ubicadas en la colonia Lázaro Cárdenas (La Presa), indicaron que hacen falta cobertores y catres ya que los que tienen son insuficientes.
Por otro lado el Centro Cultural Vistahermosa en la alcaldía Gustavo A. Madero en la capital del país con capacidad para albergar hasta un centenar de damnificados apenas cuenta con 38 personas. El lugar cuenta con catres, colchonetas, cobertores nuevos, sanitarios además de una amplia cocina con personal para atender a los asilados. Los encargados destacaron que a diferencia de los otros albergues, este cuenta con la infraestructura idónea para acoger a pacientes que requieren diálisis.
Las personas que se encuentran refugiados en el albergue aseguraron que en medio de la desgracias se sienten acogidos por los vecinos y los voluntarios de las parroquias. Destacaron que existe un lazo de fraternidad entre la alcaldía Gustavo A. Madero en la Ciudad de México y el municipio de Tlalnepantla.
Los encargados indicaron desconocer hasta cuando estarán funcionando los albergues ya que continúan los trabajos de peritaje para determinar si son habitables las casas.
La llamada zona cero es resguardada por efectivos de la Guardia Nacional (GN) donde de 141 inmuebles que fueron notificados que debían ser desalojados ante el posible riesgo de nuevos derrumbes, 80 familias ya han dejado sus casas para refugiarse en los albergues.
Cabe resaltar que durante la mañana de este sábado un grupo de cuatro topógrafos ingresó al lugar del siniestro para continuar con las labores de mapeo que después permita continuar los trabajos de búsqueda y rescate de los cuerpos de Paola y su hijo Dylan que aún se encuentran atrapados.