En el Valle de Toluca se requiere de infraestructura más segura en cuestión de ciclovías para incentivar mayor cantidad de usuarios.
Actualmente, la ubicada en Paseo Tollocan está segmentada en algunos puntos que impiden una buena circulación, coincidieron en señalar representantes de asociaciones civiles.
De acuerdo con el Perfil del Ciclista 2020, publicado por el ayuntamiento de Toluca en el que participaron con varias organizaciones de movilidad refiere son más de 40 mil los usuarios de ese medio de transporte en la capital mexiquense.
El integrante del colectivo Bici clasicxs Toluca, Iván Rosas y el presidente de Rueda Metepec A.C, Elesbaán Campos, entrevistados por separados expresaron que se requiere de más ciclopistas en la región que conectan a varias demarcaciones.
Rosas comentó que Paseo Tollocan es una vialidad concebida en las décadas de los años 60's y 70's, que tiene una cobertura en Toluca, Metepec, San Mateo Atenco y Lerma.
Dicha infraestructura, a la distancia ha cambiado, así como la visión de movilidad, apuntó. A la fecha, la ciclopista, que pasa por el municipio de Lerma en uno de sus puntos está fraccionada en un 70%.
“En esa condición es poco útil, la que va de Lerma a Toluca, está acotada, no obstante, son funcionales”.
Por su parte Campos, calificó esa ciclovía como inservible para transitar. “Esta segmentada por la infraestructura automotriz que se asentó a lo largo del tiempo”.
Agregó que la obra está olvidada y los accesos son inseguros pues los usuarios deben hacer varias maniobras.
De igual, de acuerdo con el Perfil del Ciclista, en el rubro de principales dificultades las personas encuestadas refirieron a la inseguridad del tráfico y la falta de infraestructura con un 68. 75%.
Otros problemas que expusieron fueron la falta de señalización, de seguridad pública, facilidades para combinar el uso de la bicicleta con otro medio, de biciestacionamientos y el clima.
Asimismo, un 42% respondió que para incentivar el uso de la bicicleta se requiere de más y mejor infraestructura vial adecuada como lo es ciclovía, ciclocarril y carril.
Respecto a las ciclovías del centro de la ciudad, Rosas opinó que son funcionales. Además, de que existen otras de tipo orgánico o naturales, creadas por los propios usuarios.
“El ciclismo es una forma de movilidad, que requiere de derechos a un espacio, respeto y convivencia entre los demás medios de transporte y peatones”.
Expresó que existen documentos reservados en donde pudiera considerarse una ciclovía en el proyecto del Tren Interurbano México-Toluca, lo cual no se puede saber a ciencia cierta.
El uso de la bicicleta, afirmó va más allá de una moda, sino habrá que concebirse como una alternativa de movilidad al ser un medio de transporte eficiente, seguro, económico y de calidad.
Los dos integrantes de asociaciones civiles coincidieron en expresar que las ciclovías emergentes son una alternativa para incentivar la movilidad en bicicleta durante la pandemia de Covid-19, al evitar el contacto con otras personas y con superficies comunes, al mantener el distanciamiento social.
En cuestión de higiene sólo se debe mantener limpio el manubrio y asiento, sin exponerse a espacios que son utilizados por decenas de personas.
En los últimos dos fines de semanas colectivos han intervenido las calles al pintar una bicicleta en avenidas importantes para solicitar espacios seguros.
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