Ante el inminente cambio climático que se vive en todo el mundo, en los próximos años inmediatos podrían seguirse suscitando olas de calor, tal como las que se viven actualmente en México debido al fenómeno El Niño, comentó Beatriz Cárdenas, directora de Calidad del Aire del Instituto de Recursos Mundiales México (WRI por sus siglas en inglés).
Al referir que las olas de calor que se viven actualmente ya habían sido detectadas en otras partes del mundo con anticipación, por ejemplo en Asia, la especialista en calidad del aire sostuvo que el registro de temperaturas anormales que derivan en ondas de calor) surge por diversos motivos, pero en la actualidad es debido a la transición de los fenómenos La Niña a El Niño.
“Se están registrando temperaturas anormales, no sólo por la cantidad de grados que sube el termómetro, sino por el mes en que se registra, junio en particular no era el mes más caliente, al menos en la Zona Metropolitana del Valle de México y del Valle de Toluca, pero ahora lo estamos viviendo, hay una sensación de calor mayor, nuestro cuerpo no está acostumbrado a estas temperaturas y entonces comienza a haber afectaciones a la salud”, comentó la entrevistada.
Efectos de la ola de calor en el aire
Además de los efectos a la salud, la ola de calor causa aceleración en las reacciones químicas en el aire a causa de los contaminantes dispersos en el aire.
Las olas de calor también ocasionan que no haya una adecuada dispersión de los contaminantes atmosféricos, pues los vientos son calmos, aunado a que se acelera el proceso de evaporación de materiales como los combustibles.
“Muchos materiales se evaporan con las olas de calor, a temperatura normal posiblemente podemos tenerlos en su forma líquida, pero pasan fácilmente a su estado gaseoso debido al calor, por ejemplo las gasolinas, los productos que usamos en el hogar, y al ocurrir esto, terminan dispersos en el aire y terminamos respirando estas sustancias, de ahí que haya muchas afectaciones en materia de calidad del aire cuando hay olas de calor”, explicó Beatriz Cárdenas.
Necesario hacer cambios para evitar mayor avance del cambio climático
El actual escenario debe motivar a la población y gobiernos de todo el mundo a realizar cambios importantes, pues de continuar con la celeridad en la contaminación del suelo y el aire, así como la deforestación de las zonas boscosas, los efectos del cambio climático continuarán haciéndose presentes y sus efectos serán cada vez peores.
Entre las recomendaciones destacadas, dijo, está la disminución de emisiones contaminantes, que se regularicen las sanciones a quienes contaminen deliberadamente el suelo y el aire, así como un adecuado seguimiento en la aplicación del marco normativo.
Además de transitar a energías con menores emisiones de gases de efecto invernadero y de contaminantes (descarbonización), contar con una mayor eficiencia energética y la generación de normas y políticas públicas que impulsen la sustentabilidad y la adopción de energías verdes.
“Hacemos un llamado a una acción rápida a muchas de las acciones que hacemos desde cada uno de nuestros lugares como ciudadanas y ciudadanos, el sector privado y el gobierno, para reducir la cantidad de emisiones contaminantes y, por otro lado, adaptarnos para reducir el impacto a las personas en vulnerabilidad y susceptibilidad”.
Además de los efectos de cambio climático, otra consecuencia que las personas enfrentaríamos de no adoptar las recomendaciones señaladas es el pago de un alto costo.
“Por ejemplo, con esta ola de calor se gasta más energía y más combustible por la aceleración de las reacciones químicas en la atmósfera, entonces de no hacer estas acciones de mitigación y adaptación se tiene un mayor costo que de hacerlas, muchas de estas acciones tienen un beneficio para el país mismo, entonces conviene al mismo gobierno de los tres órdenes adoptarlas e impulsarlas”.
Alerta temprana frente a cambio climático
En marzo pasado la Organización de las Naciones Unidas (ONU) solicitó a la Organización Meteorológica Mundial (WMO por sus siglas en inglés) que liderara la elaboración de un Sistema de Alerta Temprana para advertir la llegada de condiciones meteorológicas peligrosas, así como la creación de estrategias dirigidas a gobiernos, comunidades y particulares, a fin de reducir al mínimo sus impactos.
Datos de la Organización Meteorológica Mundial indican que en los últimos 50 años se ha producido casi un desastre diario de naturaleza meteorológica, climática o hidrológica (dato promedio).
Es decir, en el periodo referido la cantidad de desastres registrados se ha quintuplicado a consecuencia del cambio climático causado por las actividades humanas, el aumento de los fenómenos meteorológicos extremos y la mejora de los mecanismos de suministro de información.
Con la Alerta Temprana, que deberá ser presentada en noviembre próximo, se podrán conocer pronósticos oportunos en cuanto a crecidas, sequías, olas de calor o tormentas en todo el mundo, lo que además reduciría el gasto por daños ocasionados por estos fenómenos.