Por primera ocasión, se realizó en la comunidad de Santa María del Monte, municipio de Zinacantepec, el Festival del Hongo y del Bosque 2024, con el propósito de contribuir a que no se pierda esta tradición.
Con una escasa presencia de recolectores y vendedores de este producto, así como emprendedores y artesanos, provenientes de otras partes de la entidad, como Metepec y Temoaya, Aurelia Colorado, quien se dedica a esta actividad desde hace 35 años, lamentó que se trate de un oficio que los jóvenes ya no les interesa mucho preservar.
Al asegurar que además de ser un producto comestible desde los antepasados, a los hongos se le atribuyen propiedades curativas –pero con responsabilidad y precauciones-, doña Aurelia indicó que el kilo de su producto tiene un costo de 180 pesos.
“Nosotros vamos a buscar el hongo comestible al monte, porque no todo es comestible, y para ello tenemos que destinar prácticamente todo el día, almorzando desde las 5:00 o 7:00 de la mañana y nos llevamos unas tortas que acompañamos con te o café”, externó.
La señora Colorado, quien fue de las pocas recolectoras de hongos que participó en esta primera feria, mencionó que en esta temporada de lluvias es cuando se produce una mayor cantidad de este producto en el monte, motivo por el cual aprovechan estos meses para recoger el mayor número posible de éstos, principalmente los comestibles.
“Los hongos que estamos ofreciendo en esta ocasión se denominan clavos, terneros, orejas, panzas y duraznos, entre otros. Afortunadamente, la venta de este producto todavía podemos decir que es buena, pero a los jóvenes ya no les llama mucho la atención dedicarse a esta actividad”, puntualizó.
Para la señora Aurelia, el principal motivo de que no haya habido mucha participación en este festival se debe a que muchos recolectores no se enteraron y se organizó con pocos días de anticipación.
Por su parte, Lourdes Jasso, quien fue una de las organizadoras de este evento, efectuado en la plaza del centro de esta comunidad, comentó que se trató del primer festival con estas características en Santa María del Monte, y la idea surgió porque su familia desde hace varios años se dedica a esta actividad.
“Queremos que prevalezca la tradición de ir a buscar los hongos al monte y particularmente a mí me gusta mucho la parte turística, por ende la intención es resaltar a nuestra comunidad, así como darle presencia a nivel estatal e incluso nacional”, enfatizó.
