Ante la posibilidad de que se registre un rebrote que propicie un aumento de pacientes en hospitales, el Estado de México se encuentra preparado y para ello, en este momento hay disponibles tres mil 246 camas y 714 con ventiladores, señaló el Subdirector de Epidemiología del ISEM, Víctor Durán Mendieta.
Luego de las declaraciones vertidas por el Subsecretario de Salud del Gobierno Federal, Hugo López- Gatell Ramírez sobre un rebrote de casos y por ende de una saturación de hospitales derivado de la temporada invernal, el funcionario estatal aceptó que sí existe la posibilidad, sin embargo, dependerá del impacto que cause la influenza.
“Vamos a tener una combinación de Covid-19 con influenza y ello puede representar que más personas puedan requerir de una cama de hospital por infectarse de uno de estos virus e incluso de ambos”, refirió.
Actualmente la ocupación hospitalaria se ha mantenido en 32 y 33 por ciento en términos generales, así como en 28 por ciento en camas con ventiladores, ello gracias al descenso, que si bien ha sido lento, se ha mantenido en los últimos dos meses.
De esta forma, explicó Durán Mendieta que ahora a partir de octubre estarán atentos no sólo a los casos Covid-19 sino a los de influenza que por fortuna refirió ha tenido un comportamiento periódico.
“El primer año cuando apareció el virus de la influenza si tuvo un impacto importante pero luego descendió, en el año 2013 otra vez aumentó, pero para 2016 y 2017 volvió a bajar, y luego durante los años 2018 y 2019 volvió a subir el impacto. De tal suerte que para esta temporada se espera menos intensa”, subrayó.
Sin embargo, el Subdirector de Epidemiología del ISEM, afirmó que sería aventurado asegurar que si habrá un repunte o rebrote importante, pero, dijo, la entidad mexiquense se encuentra preparada, pues actualmente se tienen 3 mil 246 camas generales y 714 camas con ventilador.
De hecho, agregó que con las expectativas que se tenían con la llegada del virus SARS-CoV2, se prepararon cinco espacios Covid-19 adicionales con más de 700 camas, de los cuales se van a conservar cuatro.
“De estos cinco espacios que no fueron utilizados, van a permanecer cuatro, es decir, estarán disponibles 600 camas más para pacientes no Covid-19, lo que permitirá en algún momento desahogar los hospitales que hoy atienden a personas infectadas con el virus SARS-CoV2”, finalizó.