La Comisión Nacional del Agua (Conagua) pronosticó que el nivel de la presa de Valle de Bravo llegará al 17%, debido a que no pueden dejar de extraer agua para distribuirla en la Ciudad de México y la zona conurbada de la entidad mexiquense.
Así lo informó la presidenta municipal de Valle de Bravo, Michelle Núñez Ponce, luego de sostener una reunión con autoridades de los tres niveles de gobierno, el pasado 24 de noviembre en la ciudad de Toluca.
"Solicitamos en esa mesa de trabajo que se pudiera comprometer la Conagua, a que ya no se le extraiga mayor agua de la que está recibiendo nuestra presa", explicó la edil.
"Si bien es cierto que no se puede cerrar la compuerta, ya que no se le extraiga más de lo que tiene en este momento. Sin embargo, no tuvimos una respuesta favorable", lamentó.
"Dijeron que no se podían comprometer, que se le seguirá extrayendo agua a la presa y que, incluso podría llegar hasta el 17%. Es una situación muy alarmante", dijo.
Luego de marchar en defensa de la presa este sábado, la alcaldesa explicó que si se llegase al 17% el nivel de la presa, la Conagua no tendría otro lugar de dónde extraer agua para potabilizarla.
Por lo que, provocaría un desabasto de agua potable en la capital del país y la zona conurbada del valle de México.
Actualmente, son 18 metros de profundidad los que ha perdido la presa de Valle de Bravo, los cuáles se necesitan recuperar para seguir mandando agua al valle de México y a la Ciudad de México.
"Hay preocupación por los que aquí vivimos, los que aquí habitamos. Las familias nativas, y por aquellas que recientemente han venido a vivir aquí al municipio", enfatizó la alcaldesa durante la segunda marcha para salvar la presa.
Junto con vecinos del municipio, denunciaron que son más de 5 años de descuidos y omisiones de parte de la Conagua, para que el nivel de la presa esté como se encuentra en la actualidad, sin que exista una respuesta positiva a las denuncias.
"La Conagua no tomó las acciones que nosotros hubiéramos esperado. No hemos visto acciones concretas, como un plan o un programa a corto, medio o largo plazo".
Por lo que, pidió la intervención del presidente Andrés Manuel López Obrador para evitar la extinción de la presa Miguel Alemán Valdés.
"Solicitó la intervención del presidente Andrés Manuel López Obrador, para que tomé cartas en el asunto e intervenga en la Conagua, que los obligue a que tengan un plan a mediano y largo plazo, para que no acaben con las presas del Sistema Cutzamala", pidió Núñez Ponce.
Rompe autoridades locales con la Conagua
La presa de Valle de Bravo es la fuente principal de empleo para el municipio y uno de los tres vasos de almacenamiento de agua para el abastecimiento de la capital del país.
Y la Conagua lo ha descuidado, al no tomar acciones que ayuden al embalse.
"No se observa un panorama favorable, derivado de las malas acciones que se han tomado, o de las acciones a destiempo que ha tomado la Conagua", enfatizó la alcaldesa.
Asimismo, pronosticó un tiempo delicado para la presa, pues se aproxima el estiaje y es donde los caudales de los ríos disminuyen de manera natural. Por lo que, pidió que no se extrajera más agua de la que recibe el embalse.
"La autoridad (Conagua) fue muy soberbia, grosera, agresiva y no se logró que se pudiera entablar una respuesta favorable para que no se le siga extrayendo más de lo que le llega a nuestra presa", lamentó la edil.
Prestadores de servicios turísticos en pie de protesta
A esta reunión también fue invitada la sociedad civil organizada, la mayoría, prestadores de servicios turísticos acuáticos que dependen de la presa para sus actividades económicas.
Ante las declaraciones de la autoridad federal del agua, fijaron una postura de "no dejar de protestar" hasta que la presa recupere un nivel óptimo que les permita realizar sus actividades comerciales.
"Ellos (Conagua) sabían de la marcha, su intención era que, al tenernos ahí en la reunión, esto (la marcha) iba a parar. No va a parar hasta que este lago lo veamos recuperado", aseguró Esther Carrillo, vocera de la organización "Pueblo y Sociedad Civil Organizada para Salvar el Lago".
Todo lo que se ha anunciado en las últimas semanas, respecto al estado de la presa de Valle de Bravo, es que se va a secar, por lo que, en 2024 ya no puede haber presa.
"Están haciendo sus cálculos para que lleguemos a 2024. Estamos aterrados, la única forma de revertir esto es que nosotros lo paremos", dijo Esther Carrillo.
"(Pido) que los niveles de la presa no sigan bajando para que ellos (los prestadores de servicios turísticos) no sufran de este déficit, lo cual les impide llevar a cabo sus actividades como tal", pidió la alcaldesa de Valle de Bravo.