El programa “Jóvenes Construyendo el Futuro”, que el año pasado becó a más de un millón de jóvenes en todo el país, este 2020 pretende incorporar a otros 300 mil, aunque la lista de espera de quienes desean obtener un apoyo es de 800 mil.
Ese programa ha retirado a más de tres mil de las 160 mil empresas que participaban por diversas causas.
El subsecretario del Trabajo, Horacio Duarte Olivares, explicó que las empresas que fueron dadas de baja del programa incurrieron en algunas irregularidades, como: no capacitar a los jóvenes, no realizar las actividades a las que se comprometieron, recibieron denuncias de algún tipo de acoso hacia los jóvenes.
Además de retirarlas del programa, explicó, hay denuncias, cuando se presume que incurrieron en hechos que podrían ser constitutivos de delitos. “A ellos sí los vigilamos y los damos de baja del programa cuando encontramos estas irregularidades”.
“Sí hay consecuencias jurídicas, investigaciones, si se dan denuncias que hemos presentado en las fiscalías: tanto en la federal, como en los estados para que se inicien investigaciones, si la conducta ameritaba una posible sanción de otro tipo”, explicó.
El subsecretario, de visita en la capital mexiquense, dijo que las reglas de ese programa establecen que si alguna empresa incumple con lo acordado, o no otorga la capacitación, debe ser retirada del programa. También aprovechó para señalar que los jóvenes son libres de gastar su dinero en lo que deseen.
“Lo que tenemos son reglas para que si alguna empresa no está haciendo la capacitación correcta le sea retirado el programa (…) nosotros no vigilamos en qué gastan el dinero los jóvenes, es un uso de la absoluta libertad de ellos de saber que reciben una beca y lo pueden usar en lo que decidan; no hay una definición, sería muy autoritario de nuestra parte decirle a un joven que tiene su dinero en qué se lo gaste”.
En el caso del estado de México, Horacio Duarte refirió que en el año 2019 apoyaron a 81 mil jóvenes mexiquenses y esperan incorporar a otros 27 mil nuevos becarios para tener una presencia importante en el estado.
Destacó que tienen una demanda importante en el país, pues unos 800 mil jóvenes se encuentran en lista de espera, pero su capacidad presupuestal no les permite abarcar a todos.
“Sí tenemos lista de espera, hay muchos jóvenes que quieren colaborar, participar, quieren ser parte de este programa y eso ha sido parte del éxito; el asunto es que no tenemos una disponibilidad presupuestal tan amplia, pero con lo que tenemos hemos ido saliendo adelante”.
“La nacional es de 800 mil en lista de espera que quieren entrar al programa y la dinámica lo va definiendo: que las empresas liberen vacantes y que correspondan a vacantes dentro, cerca de su domicilio”.
Los beneficios inmediatos de ese programa, explicó, son: sacar a un millón de jóvenes de las calles para llevarlos a empresas, negocios, trabajos, capacitaciones, con la apuesta de que un número importante de esos jóvenes encuentren más adelante un trabajo formal. “La consecuencia es que no están en las calles, es el efecto inmediato”, precisó.