Toluca, México.- Los priistas alzan el puño, corean y arropan al gobernador Alfredo del Mazo. Quieren darle vuelta a la hoja tras su derrota electoral del primero de julio de 2018, lo llaman un "nuevo comienzo".
Ponen la mira en los comicios intermedios de 2021, cuando los mexiquenses volverán a las urnas para elegir a diputados federales y locales, así como a los 125 alcaldes de la entidad.
Con batucada y porras, los priistas reciben este 9 de marzo al gobernador del Estado de México, Alfredo del Mazo. Es el primer priista, su referente y asidero para cualquier apuesta hacia el futuro.
Lo flanquea Alejandrá del Moral, dirigente estatal del PRI. Antes Del Mazo posa para las fotografías, vídeos y selfies, mientras la ensordecedora música adereza las porras y gritos.
El encuentro entre militancia y gobernador era necesario. Han pasado ocho meses desde la contienda presidencial. Como testigos asisten cinco exgobernadores de la entidad: Ignacio Pichardo Pagaza, Emilio Chuayffet Chemor, César Camacho Quiroz, Arturo Montiel Rojas y Eruviel Ávila Villegas, este último acutal senador.
El gran ausente es el expresidente y exgobernador, Enrique Peña Nieto, sin embargo, la militancia priista lo ovaciona al estar presente en el discurso de los oradores.
A la cita también llegan los diputados federales del PRI, Ernesto Nemer Álvarez, Ana Lilia Herrera Anzaldo, Marcela Velasco, Ricardo Aguilar Castillo y Cruz Roa Sánchez, los sobrevivientes de la elección del primero de julio.
En primera fila están los integrantes del gabinete estatal, la mayoría luce un chaleco rojo, entre ellos, el secretario General de Gobierno, Alejandro Ozuna Rivero; el secretario de Medio Ambiente, Jorge Rescala Pérez; el de Desarrollo Económico, Enrique Jacob; de Desarrollo Agropecuario, Darío Zacarías; de Desarrollo Social, Eric Sevilla; y del Trabajo, Martha Hilda González.
Del pasado sexenio llegan José Manzur Quiroga y Carolina Alanís, exsecretario General de Gobierno y exdirectora general del DIFEM, respectivamente, además de diputados locales.
Entre la militancia priista está Cuauhtémoc García Ortega, quien ha cuestionado la crisis del PRI, pero ahora está sumado al nuevo proyecto.
VOLVER A EMPEZAR
El "nuevo comienzo" del PRI repite la parafernalia de antes, pues la música ameniza para quienes llegaron con demasiada anticipación y un cantante de género regional aparece con vistosas coreografías.
El sonido local también arenga a los militantes a levantar el puño “en señal de fortaleza”.
"¡Tenemos el coraje para levantarnos! y ¡somos guerreros echados hacía adelante!", se escucha, mientras en el escenario se leen frases que marcan la línea.
“Salir a reencontrarnos con los nuestros”, “Tenemos la fuerza para construir una nueva historia”, y “tenemos el coraje para levantarnos”, son algunas de esas instrucciones veladas.
Esta nueva historia que quieren contar los priistas se narra a partir de lo dicho por el gobernador Del Mazo, quien habla de tomar camino.
“El día de hoy los priistas del Estado de México nos reunimos para darle la vuelta a la página y empezar con ánimo renovado a construir un nuevo camino y un nuevo partido”, dice.
Los asistentes terminan motivados con el bombardeo de los mensajes y al sentirse involucrados.
“¿Somos o no somos capaces de construir una organización, una oferta política que conquiste y reconquiste la confianza ciudadana para ganar las elecciones de 2021?”, pregunta Del Moral a su militancia.
"¡Sí!", responden los priistas. “¡Sí se puede,! ¡Sí se puede!”, repiten como para exorcizar la derrota electoral de 2018.
Llegan al climax cuando el gobernador les recueda quiénes son.
“Somos el Partido Revolucionario Institucional y venimos del Estado de México”, afirma, "¡Que viva el PRI y que viva el Estado de México!”, lo cual provoca que los priistas se levanten y ovacionen. Su nueva historia dicen haberla comenzado.