Un grupo de ciudadanos pertenecientes a asociaciones civiles en pro del medio ambiente en Valle de Bravo, Estado de México, protestaron para detener el derribo de árboles que se está haciendo en el interior de un predio en la colonia Monte Alto.
Convocados por la asociación civil "Guardianes de Valle de Bravo", los ciudadanos repudiaron la obra de construcción de un desarrollo inmobiliario de nombre "El Sendero", en la colonia que colinda con la Reserva Estatal de Monte Alto.
"Hemos observado el desarrollo del proyecto inmobiliario de su propiedad y, con gran enojo de toda la ciudadanía, observamos el derribo de más de 25 árboles hasta este momento", enfatizaron los miembros protestantes durante la lectura de una carta dirigida al dueño del predio.
Este predio se ubica en la calle del Fresno número 5, en la colonia Monte Alto, y en su interior se puede observar el derribo de más de 25 árboles, así como un sin fin de arbolado más marcado con una mancha roja para su posterior derribo.
"Son aberrantes sus acciones; no estamos de acuerdo y nunca será bienvenido en nuestra sociedad", aseveró el lector de la carta leída al público asistente.
Argumentaron que los árboles derribados proveen de paisaje, siendo vitales para la recarga de los manantiales de la región. Por lo que urge se detenga la construcción para evitar se quede sin árboles ese lado que colinda con la reserva estatal.
La construcción en el predio cuenta con todas las autorizaciones de impacto ambiental otorgadas por la SEMARNAT con el número de permiso DFMARNAT/1603/2021, así como con las licencias de construcción otorgadas por la Dirección de Desarrollo Urbano del Ayuntamiento de Valle de Bravo.
Los manifestantes exigen se detenga el daño ambiental que se está realizando, a pesar de tener los permisos necesarios, pues como ciudadanos reconocieron, "es su deber defender al bosque y a la biodiversidad".
"No nos importa que ya haya cumplido el marco legal vigente, apelamos a su conciencia como ser humano, como habitante de este planeta para que detenga a la brevedad este destrozo", reiteraron.
Por último, aseguraron que llamarán a dar cuenta a las autoridades involucradas en los permisos para que cada uno se haga responsable del daño ecológico ocasionado.
Pues aseguraron que la valla perimetral que delimita a la propiedad ejidal con la propiedad de la reserva estatal fue quitada por la misma construcción, la cual está a cargo del arquitecto Alejandro Neri, según los documentos exhibidos en la propia construcción.
"Los guardianes de este bosque los repudiamos y, nunca, las familias que aquí vengan serán bienvenidas, no queremos más un país donde con dinero se arreglan las cosas, queremos un país y un municipio donde se cuiden los recursos", puntualizaron.
Se esperaba dejar dicha carta al dueño responsable de la construcción, sin embargo, no se encontraba nadie laborando en el momento de la protesta social.
Guardianes de Valle de Bravo buscarán un acercamiento con la presidenta municipal de Valle de Bravo, Michelle Núñez Ponce, a través de una audiencia pública para que se sume al reclamo social y les ayude a encontrar una solución.