El sistema penitenciario del Estado de México debe mejorar y cambiar, pues las cárceles no son cajones de olvido ni hoyos negros donde se mete a la gente, señaló el secretario de Seguridad, Andrés Andráde Téllez, al tiempo de proponer acciones que ya pueden llevarse a cabo durante este periodo de gobierno.
El funcionario estatal explicó que para mejorar el sistema penitenciario del Estado de México se requiere despresurizar las prisiones e incluso cambiar las medidas cautelares y privilegiar otras.
Por ejemplo, indicó, se puede recurrir al uso de brazaletes electrónicos para la gente que está sujeta a proceso, pues de esta manera se evitarán y mitigará los riesgos, toda vez que la finalidad de una medida cautelar es garantizar la presencia del imputado en el proceso penal.
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Se requiere, declaró Andrade Téllez, dignificar la función penitenciaria, pero también entender que hay seres humanos dentro del sistema penitenciario y, por lo mismo, buscar la readaptación y reinserción en la sociedad.
“No podemos pensar son cajones de olvido ni hoyos negros, donde se mete a la gente”, expresó el Secretario de Seguridad del Estado de México.
Asimismo, añadió, se debe evitar a toda costa que las cárceles se conviertan en escuelas del crimen, que es lo que normalmente ocurre en todo el país e inclusive en el mundo.
34 mil personas privadas de la libertad
Actualmente en el Estado de México la Subsecretaría de Control Penitenciario dirige al sistema penitenciario más grande del país y tiene como objetivo establecer, administrar e instrumentar su operación mediante la elaboración, implementación y ejecución de políticas públicas, programas, tratamientos y procesos técnicos de inserción social para la población penitenciaria.
En total son 20 Centros Penitenciarios y de Reinserción Social, el Centro de Internamiento para Adolescentes y las 23 preceptorías juveniles regionales, mismas que cuentan con una población penitenciaria de más de 34 mil personas privadas de la libertad.
Sobrepoblación
Este es uno de los principales problemas de este sistema penitenciario, pues de acuerdo con un informe de la Codhem, se ha documentado este fenómeno en 13 penales; Cuautitlán, Chalco, Ecatepec, El Oro, Ixtlahuaca, Jilotepec, Nezahualcóyotl Bordo-Xochiaca, Santiaguito, Lerma, Temascaltepec, Tenancingo Centro, Texcoco y Tlalnepantla.
De estos, los Centros Penitenciarios de Cuautitlán, Chalco, Ecatepec, El Oro, Lerma, Tenancingo Centro, Zumpango y Tlalnepantla, se encuentran en situación crítica por superar el parámetro del 200 por ciento de sobrepoblación, además de que albergan el 54 por ciento de las personas privadas de su libertad en la entidad mexiquense.
