Toluca, México.- Con el objetivo de salvaguardar la integridad de las mujeres víctimas de violencia en la entidad mexiquense, los Ministerios Públicos y jueces están facultados a liberar órdenes de protección, las cuales están diseñadas para prevenir, interrumpir o impedir que se realicen actos violentos en contra de las mujeres y abarcan desde la protección policial, la vigilancia del domicilio en el que vive y hasta el traslado a refugios o albergues temporales no sólo de la víctima, sino también de sus hijos.
De acuerdo con la información publicada en el sitio web oficial de la institución, las víctimas también pueden recibir auxilio de la policía para tomarlas pertenencias personales y familiares de un domicilio, el reingreso a una vivienda y la autorización otro domicilio diferente a donde sucedieron los actos de violencia.
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Además las víctimas tienen derecho a recibir auxilio inmediato de la policía en el domicilio en el que se localice o se encuentre al momento de solicitarlo, el uso y goce de los bienes y un inventario de los mismos para que lo sean vendidos o robados.
¿Cómo aplican en el agresor?
Las órdenes de protección faculta a la autoridad para que el agresor desocupe el domicilio en el que se localiza la víctima, además de estar obligado a solventar los gastos de alimentos no sólo de la ofendida, sino también de sus hijas e hijos.
Con esta orden también se faculta la prohibición de comunicarse o acercarse al domicilio en cuestión, la intimidación a la víctima, la venta o hipoteca de los bienes y la suspensión de la visita y convivencia con sus hijas e hijos.
Además, al victimario se le embargarán sus bienes para garantizar el pago de alimentos de la víctima y sus hijos, así como la retención y guarda de armas de fuego en posesión.
Las mujeres víctimas de violencia pueden acercarse al Consejo Estatal de la Mujer y Bienestar Social, al Instituto de la Defensoría Pública, a la Comisión Ejecutiva Estatal de Atención a Víctimas y a la Fiscalía General de Justicia del Estado de México.