Reaparece la cargada en el PRI: apapacha priismo mexiquense a Alito

Desayuna Moreno con la clase política y después se reúne con las estructuras

Por Violeta Huerta

  · sábado 3 de agosto de 2019

@alitomorenoc

El PRI ofrece una renovación de fondo, pero mantiene las viejas formas: la cargada, el traslado de la gente en camiones y dar prioridad a la clase política, antes que a las bases.

La “cargada mexiquense” apareció este sábado en un desayuno que sostuvieron los candidatos a la presidencia nacional del PRI, Alejandro Moreno y Carolina Viggiano con actores políticos mexiquenses, encabezados por el senador y ex gobernador, Eruviel Ávila.

La reunión privada con la clase política incluyó a legisladores locales y federales, a alcaldes, algunos ex dirigente estatales y funcionarios. Después vino el encuentro público con las bases.

En twitter, el exregidor de Naucalpan, Gustavo Parra criticó que mientras la gente esperaba el inicio del encuentro con el candidato, “Alito” desayunaba con la clase política y compartía la mesa con su compañera de fórmula, con Ávila Villegas, Miguel Sámano y Ernesto Nemer.

En otras fotografías que subieron varios priístas se podía observar al ex dirigente Carlos Iriarte, a diputados federales como: Cruz Roa, Eduardo Zarzoza, la mayoría de los diputados locales; así como Carolina Monroy, aunque ninguno asistió al evento con las estructuras.

Sin embargo, en entrevista Moreno negó que en el PRI haya priistas de primera y priistas de segunda. Rechazó que hubiera “acarreados” y dijo que son un partido vivo. Aceptó que en el primer encuentro los actores políticos le refrendaron su apoyo para la contienda de la siguiente semana.

Mientras lo esperaba la gente el ánimo no era el mejor. Los animadores pedían porras, expresar el apoyo hacia el candidato priista, pero la gente respondía con desgano. Quisieron hacer una “guerra de porras” que no funcionó.

La llegada de la fórmula Moreno – Viggiano mejoró los ánimos, pero también dejó de manifiesto que el PRI no termina de levantarse y al parecer aún les pesa la derrota del 2018, donde apenas ganaron 21 municipios, tres distritos federales y uno local.

Moreno se paseó por el auditorio: saludó y abrazó a la gente. Se tomó selfies para después escuchar a representantes de diferentes sectores. Él y su compañera de fórmula ofrecieron un PRI distinto: cercano, crítico y aprovecharon para eviar un mensaje a sus contrincantes a quienes pidieron no dividir. Aceptaron que el PRI vive su momento má difícil.

El mensaje es de cambio y de renovación, pero las prácticas al parecer no cambian al interior del tricolor.