Cuautitlán Izcalli, México.- La empresa O´Donnell, desplegó dentro del área natural protegida, policías privados y perros de ataque,para que los vecinos del pueblo de Axotlán no se acerquen a la zona y pueda seguir construyendo la zona industrial.
Desde el 24 de junio pasado comenzaron a enmallar la zona, con la aprobación del gobierno de Cuautitlán Izcalli, donde está destruyendo más de 20 hectáreas de un área natural protegida.
A pesar de que este territorio es considerado área de reserva ecológica desde el 2003 cuando el gobierno mexiquense emitió el decreto para crear el “Parque Estatal para la Protección y Fomento del Santuario del Agua Laguna de Zumpango”, el gobierno municipal, autorizó la construcción de seis naves industriales dentro del área.
Los permisos de construcción fueron supuestamente emitidos en 2016 por Martín Saavedra Rodríguez y refrendados a finales de 2017 por Juan Carlos Sánchez, actual director de Desarrollo Metropolitano y Medio Ambiente.
Por su parte el cabildo izcallense aprobó con el voto a favor del alcalde Víctor Estrada la tala de árboles dentro del área natural para construir una vialidad que servirá de desfogue para las naves industriales.
El pasado 31 de mayo la empresa O´Donnell supuestamente taló seis árboles dentro del santuario de agua, situación que puso en alerta a los vecinos quienes protegieron con su cuerpo más de 30 árboles que querían ser talados para construir los accesos de las bodegas.
La zona donde se lleva el escocido es conocida como “Los Alcanfores” y actualmente se encuentra en un juicio dentro del Tribunal Agrario, por lo cual no puede ser ocupado por ninguna persona o empresa. Este juicio fue impulsado desde el año 2000 por vecinos del pueblo como el señor Jorge Lima, quienes buscan convertir el terreno en bienes comunales para de esa forma cuidar y proteger el santuario.
La Comisión Estatal de Parques Naturales y de la Fauna (CEPANAF) dictaminó el 18 de junio que el predio si se encuentra dentro del área natural protegida por lo cual estos desarrollos no son permitidos ya sea propiedad pública o privada e informa a la Procuraduría de Protección al Ambiente del Gobierno del Estado de México (PROPAEM) para que haga las visitas y comience las denuncias pertinentes ante quien resulte responsable de la devastación ambiental y tala de seis árboles. Pero a la fecha PROPAEM no ha visitado el área afectada.
Además el espacio donde quieren construir las bodegas está catalogado por el gobierno municipal como Zona de Alto Riesgo por ser área lacustre y con tendencia a inundarse.
“En años anteriores nos hemos inundado y el nivel del agua ha subido hasta metro y medio dentro de nuestras casas, todos esos terrenos son zona de filtración de líquidos por lo que si construyen esas bodegas, en época de lluvias el agua subirá hasta dos metros o más. El Atlas de Riesgo municipal lo dice claro: ese terreno es zona de alto riesgo”, señaló el arquitecto Aldo Lima.