Las restricciones para viajar con bicicletas, mascotas y mucha carga a bordo del Tren Insurgente, impacta de forma negativa en los pasajeros y su uso a largo plazo, señalan especialistas en urbanismo y movilidad.
Son pocos los cajones de estacionamiento para bicicletas que lucen ocupados en las estaciones del Tren Insurgente. Los usuarios señalan que debido a la prohibición de viajar con sus bicis en el tren, los obliga a dejar su equipo en casa y trasladarse en transporte público. Ocurre lo mismo para comerciantes y agricultores que deben viajar con mucha carga.
“No conviene traer la bici sino permiten que viaje con ella. Prefiero irme en camión”, señaló Rubén, trabajador que a diario sube en la estación Zinacantepec y llega a la de Lerma para dirigirse a su trabajo.
De acuerdo con el urbanista Dante Álvarez, el proyecto multimodal del tren requiere de la integración de ciclovías alimentadoras e incluso de bici estacionamientos.
“El tren requiere de ciclovías alimentadoras para llegar a las estaciones, pues Toluca es una ciudad en la que de cualquier sitio puedes llegar al tren en bici”, afirmó el especialista.
Sobre el mismo tema, el catedrático del Tecnológico de Monterrey, Edgar Alfonso Benítez, las recientes normativas limitan a ciertos sectores que a largo plazo serán usuarios permanentes del tren.
“Sí, definitivamente las prohibiciones limitarían mucho a comerciantes, agricultores y otros sectores que van a la Ciudad de México”, explicó el especialista en urbanismo sustentable.
Para Benítez las medidas podrían ser temporales, debido a que el servicio es nuevo y se busca cuidar de vandalismo y mal uso.
“Yo creo que las medidas las están tomando para que los usuarios cuiden las instalaciones”, comentó el urbanista.
CUELGAN NUEVAS NORMATIVAS
En cada estación del tren se colgaron lonas con el listado de lo que se prohíbe ingresar y subir a los vagones.
La normativa del Tren Insurgente está clara en cada acceso de las estaciones: no se puede viajar con alimentos, bebidas, mascotas, patines, patinetas, bicicletas, mascotas e incluso maletas, cajas y bultos grandes.
Mediante un recorrido hecho por la estación de Zinacantepec se pudo contar 40 cajones de bici estacionamientos, de los cuales sólo cinco estaban ocupados.
En tanto, en la estación de Toluca en la esquina de Pino Suárez, se contaron 23 cajones de bici estacionamiento, de los cuales solo uno estaba ocupado.
PROPUESTAS ANTE RESTRICCIONES
Dante Álvarez expuso que para democratizar el espacio en el tren, se deberían instalar bicis públicas en las estaciones y ciclovías alimentadoras que lleguen a las estaciones.
Asimismo, generar espacios seguros y priorizar a los transeúntes y ciclistas en la infraestructura de movilidad para llegar al tren.
De igual forma, el arquitecto Benítez señaló que se debe resolver el reto de cómo llegan las personas al tren y cómo viajan.
Al respecto, dijo que Incluso se podría generar vagones especiales para personas que viajan con mucha carga o con sus bicicletas y mascotas.
“Se debería hacer un diagnóstico de cuántas personas van a utilizar bici o van a viajar con equipaje”, advirtió el especialista.