Según estadísticas de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) más de 19 mil templos religiosos resguardan arte sacro; sin embargo, los robos afectan a poco más de 26 iglesias cada semana en la zona metropolitana lo cual se agrava debido a la falta de inventarios oficiales, así lo afirmó Javier Burgos académico de la Facultad de Arquitectura de la UAM.
Aunado a esto y según datos del Centro Católico Multimedial de México Puebla es el estado que registra el mayor número de robos en iglesias; le siguen Tlaxcala, el Estado de México, la Ciudad de México, San Luis Potosí, Hidalgo, Guanajuato, Zacatecas, Morelos, Jalisco.
De acuerdo con los reportes entre los artículos más robados están las pinturas, esculturas, coronas, sagrarios y campanas.
Al respecto, Burgos aseguró que la Virgen de Guadalupe es la imagen más valorada entre los artículos robados, comprada más tarde por galerías privadas, coleccionistas mexicanos y extranjeros.
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Con base en esto, detalló que este tipo de robos ha aumentado 600% en los últimos tres años en el país “cada semana 26 iglesias mexicanas sufren robos de óleos y esculturas de acuerdo con la CEM”.
Tan sólo entre 2001 y 2010 se sabe que fueron robadas más de 400 obras de arte sacro correspondientes a la época virreinal, las cuales pudieron alcanzar precios de 35 mil a 150 mil dólares, explico el arquitecto.
Robos en el Edomex
El historiador del INAH Manuel Valdez aseguró que desde el año 2015 la inseguridad se desbordó en el municipio siendo los hurtos sacros y el abigeato los delitos de mayor incidencia.
Con 16 iglesias saqueadas, habitantes del municipio de Texcaltitlán pidieron el apoyo al gobierno federal y estatal para incrementar el número de efectivos policiacos e inhibir el delito que los estaba dejando sin patrimonio cultural.
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El ex alcalde de extracción panista Dante Lujano Huerta, confirmó el saqueo de dichas iglesias de la localidad los cuales se registraron durante los meses de octubre y noviembre del 2015.
Como resultado de esto, los delincuentes robaron de las parroquias desde las limosnas hasta las campanas de las torres que llamaban para acudir a misa.
Manuel Valdez aseguró que los habitantes de Texcaltitlán están hartos de la ola de robos que abarcan incluso el interior de las iglesias, y que afecta por igual a las 32 comunidades que integran el municipio.