El diputado Enrique Jacob Rocha afirma que el estado crítico en el que se encuentra el Issemym es producto del grave error que cometió el Grupo Parlamentario de Morena en el 2018, cuando, dijo, echó para atrás la ley que le daría solvencia financiera al instituto para pagar pensiones.
Estimó que están pendiente de concretar su trámite jubilatorio un aproximado de 60 mil trabajadores mexiquenses y asegura que lo que pasa con el Issemym no es muy diferente a lo que enfrentan el resto de los sistemas de seguridad social en el país, incluyendo a los dos más importantes: el Seguro Social y el Issste.
La administración estatal anterior tomó la decisión de modificar la Ley del Issemym en 2018 y cambió los parámetros de cuotas y aportaciones.
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Fue una reforma impopular, “pero son decisiones responsables que a la larga le darían viabilidad a este instituto”.
Cuando se discutió en la Legislatura la reforma, Morena votó en contra y adelantó que buscaría derogar la ley más adelante, lo que hizo a fines del 2018, pues teniendo mayoría pudo llevarlo a cabo, sostuvo Jacob Rocha.
Esta medida electorera, agregó, solo ayudó a comprometer aún más el esquema de pensiones de los trabajadores del estado y municipios, así como la calidad del servicio médico.
La irresponsable decisión de los legisladores de Morena al derogar la reforma, cuyo costo político y desgaste ya lo había asumido la administración estatal pasada, significó que el fondo de pensiones del Issemym dejaría de recibir cerca de 40 mil millones de pesos durante los próximos años, añadió.
El diputado del PRI informó que, de hecho, este año el presupuesto estatal tuvo que considerar 6 mil millones de pesos para hacer frente a las pensiones.
Aseveró que el efecto boomerang llegará y pronto, "no le quedará otra alternativa a la administración estatal que proponer reformas a la ley del Issemym", indicó.
Jacob Rocha sostiene que el cambio en la dinámica demográfica, donde afortunadamente se ha incrementado la esperanza de vida de los mexicanos, por lo que los pensionados viven más, requiere sostener un flujo de pensiones mayor.
Además, dijo, requieren de más años de atención del servicio médico, porque son una población expuesta a enfermedades costosas, de tipo crónico degenerativas, lo que cuesta mucho dinero.
Por lo anterior se ha tenido que modificar la legislación en distintos momentos, cambiando parámetros en cuotas, aportaciones y reglas para pensionar a los trabajadores, “que funcionaban hace décadas, pero que hoy por la nueva demografía son inoperantes”, comentó.
El diputado Jacob explicó que se requieren montos crecientes de recursos del presupuesto estatal para financiar las pensiones y la calidad en el servicio médico.