El 2018 fue el año en que menos viviendas se han construido en la última década en el Estado de México, con apenas 8 mil 47, la gran mayoría de tipo mixto, seguida de las de interés social, popular, medio, y por primera vez, en 10 años no se edificó ninguna residencial.
De acuerdo con datos del primer informe del gobernador, Alfredo del Mazo, el auge en las construcciones de viviendas se vivió en el sexenio de Enrique Peña Nieto, pues en el 2009 se construyeron 75 mil 164; mientras en el 2011 fueron 65 mil 559, en el 2008 sumaron 56 mil 994 viviendas, la mayoría de tipo mixto y de interés social.
Sin embargo, el siguiente sexenio las construcciones disminuyeron considerablemente, pues entre el 2012 y el 2017 oscilaron entre las 10 mil 514 y 39 mil 453 en el 2017, este último año es en el que más casas se edificaron durante la administración de Eruviel Ávila.
El INFONAVIT ha alertado que existen unas 500 mil viviendas abandonadas en el país y José Antonio Díaz, director general de Comunidades Que Renacen (CQR) afirmó el año anterior que casi un 20% están ubicadas en el Estado de México.
Ese fenómeno se ha registrado por cuestiones como: la falta de servicios, entre ellos, de transporte, la inseguridad, la falta de trabajo, la pérdida de un empleo y porque muchas personas ya no pueden pagar sus créditos.
Los municipios donde más viviendas se han construido en los últimos años son también donde más han ido abandonadas, entre ellos; Huehuetoca, Tecámac y Zumpango.
El Frente Mexiquense en Defensa de una Vivienda Digna denunció desde hace años que las empresas en la entidad han construido casas con materiales de mala calidad, sin respetar las normas, ni contratar seguros y eso representa un riesgo para la ciudadanía; por lo cual presentaron denuncias que involucraban a ex funcionarios estatales y municipales.
Humbertus Pérez Espinoza fue detenido y está recluido desde noviembre del 2015 acusado de robo con violencia, aunque él ha asegurado que no hay pruebas en su contra y todo ha sido fabricado.